FC BARCELONA 5-1 FENECVÁROS: MANITA PREVIO AL CLÁSICO
Por: Miquel Villarroya
El conjunto de Ronald Koeman cumplió con su cita y goleó en su primer partido de esta edición de la Champions League. A partir de un juego bastante más fluido que ante el Getafe, también condicionado por los problemas defensivos del cuadro húngaro, el Barça generó peligro con asiduidad y acabó marcando hasta cinco goles. Esta fluidez comentada, fue clave, ya que permitía que las triangulaciones que se formaban en cada costado (en izquierda Dest-Ansu-Coutinho/De Jong y en derecha Messi-Roberto-Trincao) se ejecutarán con precisión y efectividad. El balón circulaba de lado a lado (sobre todo del izquierdo al derecho), gracias a un gran Coutinho, que activaba a Messi y se aceleraba por la zona menos densificada del campo. Uno de los nuevos en el ‘XI’ fue el bosnio Pjanic, que dejó una gran actuación copando gran parte del verde y siendo protagonista en cada circulación culé.
Asimismo, Ansu Fati volvió a dejar destellos de su calidad y capacidad anotadora, Messi jugó “de Messi” y el portugués Trincao desarrolló un rol de compensador del argentino, muy asociado a la ruptura e interesante pero sin poder ser valorado debido a las facilidades que presentó el conjunto de Rebrov en el Camp Nou.
CHELSEA 0-0 SEVILLA: JUEGO DE DAMAS
Por: Manu Escuder
Julen Lopetegui y Frank Lampard jugaron a las damas sobre el verde de Stamford Bridge. Se desafiaron, se contrarrestaron y acabaron obteniendo un único punto de recompensa. El técnico español formó con su clásico 4-3-3, siempre enfocado a las superioridades exteriores y al centro lateral. Como consecuencia, en el Chelsea, lo más destacado fue el repliegue y el juego de coberturas para evitar la profundidad del Sevilla. Timo Werner estuvo a su nivel: rindiendo con autosuficiencia, de forma independiente al colectivo, generando incluso cuando más sufría su equipo. Kai Havertz se unió a la fiesta con una gran actuación.
No obstante, y amén del buen rendimiento defensivo que ofreció el cuadro londinense, las sensaciones ofensivas a nivel coyuntural distaron de las esperadas. Faltaron asociaciones en campo rival. Darle un sentido al ataque, a las posesiones en zonas avanzadas. Dibujar triángulos para profundizar. Únicamente así se podría haber hecho frente a las grandísimas actuaciones de Fernando y Gudelj sin balón.
PSG 1-2 MANCHESTER UNITED: SOLSKJAER VOLVIÓ A CONQUISTAR PARÍS
Por: Roberto González
Ole Gunnar Solskjaer volvió a conquistar París. Como en aquella noche en 2019, en octavos de final de Champions, volvió a vencer al PSG, y esta vez dejó una exhibición táctica para superar a Thomas Tuchel. Primero, a través de su 5-2-3 inicial, buscó una presión alta con marcas al hombre, donde los puntas (Martial-Rashford) apretaban a los centrales (Diallo-Kimpembe), Bruno Fernandes iba sobre el pivote (Danilo) y los carrileros (Telles y Wan-Bissaka) emparejaban a laterales (Florenzi y Kurzawa). Allí, también planteó un repliegue medio-bajo a través de buenos relevos de Fred y McTominay en el medio y formando triángulos en banda para evitar defender la frontal y evitarle al máximo el mano a mano a los centrales (Shaw, Lindelöf y Tuanzebe) con Neymar, Di María y Mbappé. Luego, con balón, buscó salir jugando y asentarse en posicional con un 4-2-3-1 donde el ex Porto pasaba de ser carrilero a ser extremo zurdo, de manera que Martial iba a la punta y Rashford a la derecha. Al final, buscando acelerar tras el empate francés, sacó al lateral brasileño, metió a Pogba y dibujó un 4-3-1-2 con el que asumió más riesgos, spresionó mejor y logró sacar la diferencia final.
El nombre más especial de la noche fue Axel Tuanzebe. Tras casi un año fuera de acción por constantes recaídas de su lesión en el muslo, el canterano del Manchester United rindió a un nivel muy alto para no haber jugado desde diciembre de 2019. No sólo fue capaz de ganarle dos duelos a velocidad a Kylian Mbappé, sino que asumió un papel vital dando solidez a la defensa del área de los Red Devils y se mostró una opción que el DT noruego seguro querrá tomar en cuenta.
LAZIO 3-1 BORUSSIA DORTMUND: LOS DE INZAGHI SE PONEN NOSTÁLGICOS
Por: Hugo Marugán
La Lazio de Simone Inzaghi recordó al equipo de la temporada pasada pre-COVID, especialmente durante una primera parte donde pasaron por encima del Borussia Dortmund. A partir de su presión media, con Luis Alberto tapando a Hummels y el colectivo negando cualquier espacio interior, los locales lograron generar robos en campo rival, como el del 1-0 en una pérdida entre Meunier y Bellingham. Además, el conjunto italiano también contó con una gran versión de Luis Alberto como interior de posesión por izquierda, creando sistema en el lado fuerte de elaboración.
Los de Lucien Favre tuvieron una reacción en la segunda parte, especialmente tras el cambio a 4-2-3-1 y contando con mecanismos interesantes, como por izquierda con Jadon Sancho abierto y Guerreiro ocupando zonas intermedias, pero cuando más se sentía el empate, la Lazio logró el 3-1 en una transición lanzada por Luis Alberto, que confirmó así una grandísima actuación.
ZENIT 1-2 BRUJAS: A FUEGO LENTO EN SAN PETERSBURGO
Por: Iñaki María
Tras una soporífera primera mitad donde prácticamente solo Vanaken probó a Kerzhakov con su disparo de media distancia y sus llegadas desde segunda línea para no desperdiciar tantos centros laterales, el segundo periodo sí nos deparó el ritmo esperado. Como si de una poción mágica se tratase, ambos equipos salieron a por todas, especialmente el equipo de Semak que en su mejor tramo recibió el 0-1 en el 63´ tras una jugada un tanto rocambolesca. Pero hubo capacidad de reacción por parte del conjunto ruso, falto de amplitud, pero mucho mejor desde que Dzyuba se escoró a la derecha para buscar el emparejamiento con Ricca (lateral izquierdo reconvertido a central por las bajas de Deli y Mitrović), evitando así el marcaje incómodo de un Mechele que sufrió más para defender la chispa de Azmoun.
Lovren empató 10´ después con un zapatazo desde 30m y, cuando el partido parecía acabado, De Ketelaere remachó una gran jugada colectiva que acredita la superioridad asociativa de Vormer y Vanaken. Un partido con detalles tácticos donde el Zenit salió en 4-4-2 (rombo) dando libertad a un gris Driussi, mientras que el Brugge defendió en 4-4-2, aunque en ataque posicional variaba a 3-1-4-2 con Sobol y Diatta carrileros.
DYNAMO KYEV 0-2 JUVENTUS: PRIMERA SINFONÍA EUROPEA DEL ANDREA PIRLO ESTRETAGA
Por: Memo Navarro
En un recital que todavía distó de la armonía deseada y que, sin duda, extrañó al músico diferencial de la plantilla, las premisas fundamentales de Andrea Pirlo como jefe de orquesta de la Juventus terminaron por silenciar el recinto de la capital ucraniana. La Vecchia Signora nunca perdió la paciencia en su afán por girar al bloque dirigido por el mítico estratega rumano Mircea Lucescu, quien debutó a Pirlo en el Brescia, a través de la amplitud que proveyeron tanto Federico Chiesa como Juan Guillermo Cuadrado. Este último con la encomienda de juntar al equipo por el sector derecho en fase ofensiva y replegar como lateral a la hora de defender.
Eso, sumado al incesante deseo de los mediapuntas, Ramsey y Kulusevski, por atacar espacios, llegar al área y finiquitar la sinfonía, llevó al conjunto italiano a estar siempre más cerca de la victoria. Al final, el español Álvaro Morata se encargó de materializar la superioridad con un doblete. Ganar de visitante es importante, y aún más sin Cristiano Ronaldo.
RENNES 1-1 KRASNODAR: ADAPTARSE A LA CHAMPIONS
Por: Manu Escuder
Dominar una competición nacional no supone nada de cara a disputar una edición de Champions League. La gama de contextos, escenarios y retos nuevos que ofrece la competición es motivo de adaptación en los novatos… O tendría que serlo. El Krasnodar de Murad Musayev, diferenciado en Rusia por su tendencia hacia el juego combinativo, se vio forzado por sus bajas a ofrecer una versión ciertamente distante a la habitual. Partiendo del 4-2-3-1 con los extremos totalmente abiertos, los centrales aprovecharon cada intervención para activar a estos mismos hombres de banda a través de desplazamientos largos.
No obstante, el ritmo (bastante alto, por cierto) lo marcó el Rennes de un Eduardo Camavinga que no parece necesitar adaptación alguna. A sus 17 años, el francés dejó su primera actuación titánica en Copa de Europa como interior zurdo. Influyó a distintas alturas, condicionó el bloque medio rival situándose entre líneas (descendiendo y estirando, o simplemente recibiendo y rotando) y volvió a rendir culto a lo absurdo a través de su desparpajo técnico, físico e interpretativo. El partido fue totalmente suyo.
RB LEIPZIG 2-0 ISTANBUL BASAKSEHIR: LA NOCHE DE ANGELIÑO
Por: Roberto González
El RB Leipzig abrió de forma solvente su participación en la Copa de Europa, y lo consiguió mediante dos maneras. Primero, a través de la pizarra de su estratega, Julian Nagelsmann. El joven entrenador alemán dispuso su habitual 3-4-2-1 pero, más allá de haber conseguido dos goles tan rápido (16’ y 20’) por errores defensivos y una presión precisa, no logró controlar al rival hasta que abandonó la defensa impar y modificó al medio tiempo al 4-1-4-1, igualando la estructura del campeón turco. En todo caso, allí emergió Angeliño. El lateral español comenzó como carrilero -así consiguió su doblete- y terminó como extremo zurdo. En ambos roles, se encargó de rasgar por dentro a la zaga del oponente con buenos desplazamientos en el intervalo central-lateral (Caiçara-Skrtel) y permutando bien su zona con un Emil Forsberg que aún necesita más para hacerse pesar en este equipo.
De cualquier modo, el İstanbul Başakşehir es un equipo con su carisma. No sólo es que sea el monarca de su liga, sino la forma en que, más allá del rival, tiene claro cómo quiere competir. El equipo turco ya se midió con cierta autoridad a uno de los semifinalistas de la pasada edición de la Champions League. Incluso, lo obligó a hacer ajustes para mantener la ventaja a salvo. Nombres como Martin Skrtel, Edin Višća, Demba Ba, Fredrik Gulbrandsen, Junior Caiçara o Rafael nos hacen volver en el tiempo. Bastante fetichismo en el grupo que dirige Okan Buruk.