Roberto de Zerbi, ex Sassuolo y Shakhtar Donetsk, es uno de los entrenadores de moda en el panorama europeo actualmente. Dirige al Brighton, y cada jornada maravilla al espectador que se sienta a ver al equipo de la costa sur de Inglaterra.
El sábado iba a Old Trafford con el objetivo de sacar los tres puntos, y lo logró. Como siempre, construyendo desde atrás con salida limpia atrayendo marcas para generar espacios con la ayuda del ‘tercer hombre’. Y con su portero, Steele, siendo gran protagonista en la construcción.
El 0-2, obra de Pascal Gross es puro sello De Zerbi. Todos tocan el balón, desde el arquero hasta Gross que finaliza amagando previamente. Con el alemán llegando desde el centro del campo hasta el área con espacio debido a la incapacidad de Eriksen cubriendo grandes áreas sin la eficacia de Casemiro.
Con un rombo en la medular salió Erik ten Hag y De Zerbi lo contrarrestó con un 4-4-2. Con esta formación, explotó las zonas amplias con Lallana permaneciendo a la altura de Welbeck y un doble pivote conformado por Dahoud y Gross.
El Manchester United pretendió minimizar el peligro por el carril central del Brighton, pero los seagulls encontraron un arma en banda izquierda con Lamptey a banda cambiada con mayor ángulo de pase y profundidad, aprovechando las desconexiones de McTominay, Lindelof y Dalot; como en el 1-3 de João Pedro.
Constantes arrastres de Welbeck sacando de zona a Lisandro Martínez. Además, pudo recibir bastante entre Casemiro y Eriksen. La aportación y presión de Adingra fue excelente en derecha, percutiendo en ataque entre el lateral y central para abrir hueco a Welbeck.
La clave está en que De Zerbi explotó sus costados con Dunk y un gran Van Hecke, catalizando el juego hacia fuera como ‘centrales anchos’, ganando pase vertical y opciones por fuera.
En salida de balón rival, Dahoud o Gross avanzaban hasta la zona de la mediapunta para obstaculizar a Casemiro, Mitoma cubría a McTominay en el medio, mientras que Welbeck tapaba la línea de pase de Onana hacia Lisandro. De esta manera, obligaron al portero a enviar en largo.
Un hombre que tuvo mayor libertad fue Gross, cayendo más profundo para atraer presión y empujar a Veltman hacia el horizonte. Libertad para el alemán es igual a grandes problemas para el rival.
Como dato final, el Brighton es el único equipo que no ha realizado ni un sólo saque de puerta en largo en estas cinco jornadas de Premier League. Porque como dice su técnico, sacar en largo es apostar, y él prefiere trabajar. Prioriza que sus jugadores reciban en los pies que en los dientes.
El Brighton es un equipo que sabe lo que hace y es extremadamente difícil de aniquilar. Un conjunto que te llena el ojo, que engancha. Todos creen en la idea del italiano. Siéntensen y disfruten, De Zerbi es oro.
