HISTORIAL:
- Serbia, como país independiente, nunca ha participado en una Eurocopa.
- Siendo Serbia y Montenegro, alcanzó los 4tos de final en el 2000.
- Siendo Yugoslavia, fue subcampeona en 1960 (ante Unión Soviética) y 1968 (ante Italia).
¿CÓMO CLASIFICÓ?
ANÁLISIS:
Aunque pueda costar creer, Serbia va a disputar en Alemania su primera Eurocopa como nación independiente, la única debutante en este torneo junto a Georgia. Ha disputado ya hasta tres Mundiales en la era moderna, sin ser ni Yugoslavia ni Serbia y Montenegro, pero la competición europea se le resistía. Hasta ahora.
A Alemania llegan con una plantilla algo rara, repleta de carácter balcánico, que junta a grandes jugadores en el tramo final de sus carreras (Tadić, Gudelj), a otros, llamados a dominar el presente, que han perdido algo de ritmo competitivo y ojo mediático marchándose a Arabia Saudí (Sergej Milinković-Savić, Mitrović) y otros, destinados a ser el futuro, que no acaban de romper del todo el cascarón, caso de Dušan Vlahović.
El seleccionador, Dragan Stojković, ha ido probando muchos esquemas y variantes en sus partidos de clasificación, por lo que no está claro qué versión de Serbia veremos. Aunque sea un entrenador partidario del sistema de tres centrales, algo que le favorece las cosas en la postura que adopta sin balón, algo que ya se desmenuzará, también es común verle utilizando una línea de cuatro atrás. De hecho, los cambios entre un sistema y otro durante los partidos son más que habituales. Hay jugadores que pueden formar en diferentes líneas del campo (Gudelj mediocentro o central; Sergej Milinković-Savić atacante o en el doble pivote) y existe la duda de si jugará con un solo atacante o, teniendo en cuenta la buena nómina de delanteros que posee (Mitrović, Vlahović, Jović), sacrifica a un centrocampista para jugar con doble punta.
Sea como fuere, entrando en el análisis propio del equipo, es una selección que no tiene ningún inconveniente en salir en largo desde atrás, algo nada raro teniendo en cuenta que posee a dos jugadores más dominantes en el juego directo, ganando el duelo y dejando de cara, del panoramal actual: Aleksandar Mitrović y Sergej Milinkovic-Savić. El equipo no solo les tiene a ellos para ganar esas situaciones, sino que poseen un buen sistema para ganar las segundas jugadas o atacar las prolongaciones, haciendo daño de una manera directa y sencilla.
De hecho, aunque salgan jugando por bajo, no deja de ser un trampantojo para atraer, incitar al rival a saltar y salir en largo los dos jugadores mencionados, que pueden enfrentar situaciones atacando última línea de cara y en igualdad numérica. No se ponen nerviosos en primeros pases, y tampoco es un equipo que se precipite. Juntan pases, los repiten, mueven de un lado a otro, tienden la trampa al rival y, cuando saltan, salen en largo. Los carrileros suelen fijar muy arriba desde bien temprano en la jugada, buscando estirar y partir el bloque rival, mientras que en primeros pases poseen mecanismos interesantes involucrando a los centrales y el doble pivote.
Por ejemplo, es muy común que uno de los miembros del mediocampo descienda a primera línea, formando pareja con el central del medio, mientras los centrales exteriores aprovechan esta situación para abrirse e incluso incorporarse al ataque. De esta manera, aunque en el papel se dibuje una línea de cinco, en la práctica muchas veces se comporta como una de cuatro, con los carrileros como extremos, los centrales exteriores de laterales y un mediocentro bajando como central.
Si no han logrado atacar de la manera rápida que les gusta, y se tienen que instalar en campo rival con la posesión del balón, se les notan un poco más las carencias. Son un equipo muy, muy exterior, algo lógico teniendo en cuenta que poseen a grandes centradores desde fuera (Filip Kostić) y una capacidad rematadora en el área que asusta a los más altos, con muchos centímetros que sumar para el remate.
En los ataques posicionales, Dusan Tadic se erige en el hombre clave, con el del Fenerbahçe con mucha libertad para descender a la base, buscando crear juego, o para sumarse al costado izquierdo, el fuerte del equipo, buscando sobrepoblarlo para atraer al rival ahí y luego liberar a Živković en lado débil. Sin embargo, a veces da la sensación de que el equipo necesitaría a dos Tadić, uno en una altura inferior, la base de la jugada, y el otro en zonas intermedias. Si Dušan espera a recibir, falta alguien que agilize por detrás y le encuentre por delante, mientras que, si baja a crear, le falta un destinatario que otorgue pausa entre líneas y ayude al equipo a progresar por dentro. Son un equipo que se maneja bien siendo tan exterior, pero a veces la sensación es que atacan de esa manera porque no tienen más alternativas.
Como apunte extra, y como se ha podido intuir teniendo en cuenta los grandes centradores y rematadores que tienen, son un equipo que causa mucho peligro en situaciones a balón parado. Si el encuentro se atasca, siempre tienen esa opción para encontrar el camino hacia el gol.
En la fase sin balón Stojković ha matizado un poco su propuesta, y es que, hasta hace no mucho, el equipo serbio se caracterizaba por buscar presiones salvajes, muy agresivas, emparejando hombre a hombre por todo el campo. Lo que les podía dar éxito teniendo en cuenta que es una plantilla con muchos ganadores de duelos (Nikola Milenković el mejor ejemplo) pero que también arriesgaba en demasía. Ahora, se les puede ver con una búsqueda más por orientar que por robar, no saltando todos a la vez sino manteniendo superioridad en última línea, o incluso situaciones de bloque medio.
Pueden sufrir en situaciones de transición defensiva, si no logran recuperar de primeras, teniendo en cuenta que suelen quedar algo desprotegidos ante la pérdida (carrileros muy arriba, centrales exteriores sumados al ataque) lo que puede repercutir en problemas defendiendo a campo abierto, ya que tampoco tienen un corrector veloz en última línea para solventar este tipo de situaciones.
Serbia lleva años dando la sensación de que tenían un muy buen equipo que luego no lograba grandes resultados ni correspondía a las expectativas. Ahora, que los mimbres parecen ser un poco peores, han logrado clasificarse para la primera Eurocopa de su historia y quieren demostrar que pueden ir a por más.
XI TIPO:
FIGURA: SERGEJ MILINKOVIĆ-SAVIĆ
Pudo decepcionar Sergej Milinković-Savić cuando, después de años atrayendo las miradas de los mejores equipos del mundo, el pasado verano, contando 28 años, abandonó la Lazio para marcharse al Al-Hilal saudí. Allí su temporada ha sido, desde un punto de vista estadísitco, impecable. 11 goles y 10 asistencias en un equipo que ha conquistado liga y copa. Pero queda el recelo de no verle jugando en las mejores competiciones.
Es un centrocampista que puede hacer muchas cosas, que es un fantástico receptor de juego directo, que aguanta bien de espaldas, retiene ante presión y que llega con mucho peligro desde segunda línea, aportando su buena cuota de goles. Es un fijo para Stojković, ya sea en el doble pivote o unos metros por delante, más cerca del área.
PROMESA: IVAN ILIĆ
Pese a contar con tan solo 23 años, son ya muchos años de Ilić rindiendo a un buen nivel, desde que arrancó su carrera en Serbia, su paso por el Breda neerlandés y varias temporadas en Italia entre el Hellas Verona y el Torino. En estos dos últimos equipos, bajo las órdenes del croata Ivan Jurić, ha destacado en un sistema que se asemeja al de la selección, con mucha presión individual, duelos y juego dinámico llegando al área.
Tiene diferentes opciones Serbia en el medio, y puede que la veteranía de Lukić o la opción de adelantar a Gudelj ganen enteros, pero Ilić es un jugador que aporta mucho trabajo y que facilitaría la vida a sus compañeros.
ENTRENADOR: DRAGAN STOJKOVIĆ
Después de coger las riendas de la selección serbia en 2021, remató la proeza de clasificarles al Mundial de Qatar (aunque salió de ahí con una decepcionante eliminación en fase de grupos) y ahora les ha clasificado para la primera Eurocopa de su historia. Hombre importante dentro del fútbol serbio, tanto por su pasado como jugador como por haber presidido la Asociación de Fútbol de Yugoslavia hace ya 20 años.
Como entrenador, su experiencia se limitaba a dos aventuras exóticas en Japón, dirigiendo al Nagoya Grampus, conquistando la liga nipona, y en China, al mando del Guangzhou City. Ya es el mejor resultado histórico de Serbia en una Eurocopa, pero Stojković no olvida los tiempos de gloria de la Yugoslavia que él vivió.
LISTA DE CONVOCADOS:
