Viajando por las sedes: Stuttgart

Mapa

Cuándo y cómo se fundó

Esta ciudad a orillas del río Neckar comenzó oficialmente su vida en el año 950 d.C., y esto para estándares europeos es una ciudad joven, aunque los romanos habitaron el punto más cercano con el río, lo que ahora se conoce como el distrito Cannstatt. Construyeron una ciudadela, pero cuando los alamanes invadieron la zona, hasta ahí llegó. En el siglo X, las invasiones húngaras le insuflaron vida de nuevo, pero el conde de Suabia Liudolf, hijo del rey Otto I, vio potencial el área para la crianza de caballos.

Origen del nombre

El nombre viene del antiguo alto alemán “Stuotgarten”, o “ganadería”. Esta palabra pasó al suabo “Stuagart” al perder la t media. Hay otra teoría, que dice que en realidad el nombre es “Stutten Garten”, o “jardín de yeguas”

Breve historia

Stuttgart fue objeto de codicia entre los marqueses de Baden y los de Wurtemberg, y llegó un punto en el que se unieron. Lo que permitió que Stuttgart comenzara a atraer población fue terreno fértil. En un contexto donde el agua potable era un bien preciado, la producción de vino era tanta que cada habitante recibía dos litros de vino como ayuda social. Stuttgart fue escenario de intrigas como toda buena ciudad europea donde se decide la vida de sus súbditos y se pelea por el poder, pero eso trajo prosperidad.

Stuttgart tuvo un lastre con los franceses, ya que con la Guerra de los Treinta Años y las invasiones del rey Luis XIV, le costó trabajo recuperarse. Tuvo que llegar el congreso de Viena con el establecimiento del estado de Wurtemberg y posteriormente la revolución industrial para más o menos recuperar esa prosperidad e importancia de tres siglos atrás. A finales del siglo XIX se plantarían las semillas de la industria automotriz.

Stuttgart tampoco escaparía a las consecuencias de la II Guerra Mundial, con bombardeos aliados y luego la liberación de tropas francesas. Esto último salió peor, porque el número de violaciones de soldados galos fue récord, un escándalo que llegó hasta la Casa Blanca. Por ello hubo tensiones entre Harry Truman y Charles de Gaulle; el estado de Baden-Wurtemberg estaba técnicamente en la zona destinada para los franceses, pero París finalmente a regañadientes accedió dejar la ciudad a la administración norteamericana.

En Stuttgart se promulgó el plan Marshall para la reconstrucción económica de Alemania. Washington se fue en 1952, pero el ejército estadounidense permanece hasta nuestros días. Stuttgart fue candidata para ser la capital de Alemania Federal.

Importancia de la ciudad

Stuttgart es conocida como “la cuna del automóvil”; aquí se encuentran las automotrices Mercedes Benz y Porsche. Esto ha dictado las dinámicas de Stuttgart en los últimos 120 años. También está entre los ríos Danubio y Rin, por lo que el comercio termina fluyendo lo quieran o no, sin contar el poderío en cuanto a agricultura. Stuttgart también tiene un tráfico incesante, tanto por aire (el sexto aeropuerto más concurrido de Alemania), como por tierra (de los peores embotellamientos de Europa). Tiene la segunda bolsa de valores en importancia detrás de la de Fráncfort. Toda esa prosperidad ha atraído a gente de fuera de Baden-Wurtemberg y de Alemania por igual: se calcula que cuatro de cada 10 habitantes de Stuttgart tienen ascendencia inmigrante; para fines comparativos, la relación migrante en el resto de Alemania rebasa apenas el 25%.

Población

Stuttgart tiene una población de 632.000 habitantes, pero cuando hablamos de la zona metropolitana, asciende a 5,5 millones de habitantes. Es así la cuarta zona conurbada de Alemania. 

Qué visitar

Los museos de Mercedes-Benz (Mercedes-Benz Museum) y Porsche (Porsche Museum) son la parada obligada en Stuttgart para conocer el crecimiento de la ciudad. Por supuesto que va para el amante del automovilismo, pero tampoco será irrelevante para el que no está tan versado en coches. Conoce toda la historia del automovilismo con prototipos y modelos icónicos.

En cuanto al arte, Stuttgart tampoco se queda atrás. La galería estatal (Staatsgalerie) comprende obras de pintura europea hasta el siglo XVIII, pero la Nueva Galería Estatal (Neue Staatsgalerie) no desentona, con presencia de Rubens, Rembrandt, Monet y Picasso. Alejado de ahí, el Kunstmuseum está dedicado al arte moderno y contemporáneo, para que le des oportunidad a artistas alemanes.

El parque Killesberg (Killesbergpark) te recibirá en su mejor momento, verano. Es el principal espacio verde construido para la expo mundial de horticultura. 100 hectáreas de jardines nos dan un plan bucólico para descansar del ajetreo de la Euro. Ahí está una torre de 50 metros de altura hecha de cables de acero que soportan el peso de los visitantes.

La Schlossplatz es el corazón de Stuttgart, con un espacio lleno de jardines. A un lado tienes el Neue Schloss, la antigua residencia de los reyes de Wurtemberg

El Palacio Solitude (Schloss Solitude), de estilo rococó, era el espacio de caza para el duque de Wurtemberg, y de ahí sale una avenida de 13 kilómetros que conecta al Palacio Ludwigsburg, su residencia, de los palacios barrocos más grandes y hermosos de Alemania.

Otra plaza que merece la pena ser conocida es la Schillerplatz, con una estatua del genial escritor.

Y dentro de las curiosidades de Stuttgart está el Museo del Cerdo (Schweinemuseum). No es broma: todo tiene que ver con este animal, desde peluches hasta pinturas.

Stuttgart también tiene la primera torre de telecomunicaciones de hormigón del mundo, la Fernsehturm. Sube a la plataforma de observación de 150 metros de altura (la torre mide 217 metros) para las mejores panorámicas de la ciudad.

Un atractivo turístico de Stuttgart es un funicular de madera que conecta… a un cementerio. Aunque no lo creas, ahora ese cementerio es más tranquilo y es un paseo que ya se quitó de su tétrica personalidad.

A las afueras de Stuttgart también hay cosas que hacer: un tour de vino y gastronomía en Bad Cannstatt, con viñedos a orillas del río Neckar; ir a la biblioteca pública de Stuttgart (Stadtbibliothek); regresar a la Edad Media en el pueblo Esslingen am Neckar, aunque sea por solo un día, y finalmente visitar el portentoso castillo de Hohenzollern (Burg Hohenzollern).

Estadio: Stuttgart Arena

Ha pasado por varios nombres: Stuttgarter Kampfbahn, Adolf-Hitler Kampfbahn, Century Stadium, Neckarstadion, Gottlieb-Daimler-Stadion y Mercedes-Benz- Arena. Fue construido de 1929 a 1933 por los arquitectos Paul Bonatz y Friedrich Scholer. Cuando Stuttgart estuvo bajo ocupación estadounidense, sus tropas jugaban beisbol en este estadio. En los 80s y 90, este era el patio de recreo de la Mercedes-Benz, y de hecho esta automotriz financió la remodelación de este estadio. Ha recibido tres finales de Champions League: 1959, 1962 (repetición) y 1988. Además, sede de la Euro 1988 y los mundiales de 1974 y 2006. Desde 2009 es un estadio de futbol únicamente. Tiene capacidad para 60.500 espectadores y 54.000 para partidos internacionales. Es la casa del club VfB Stuttgart.

Qué partidos se juegan ahí

Distancia con otras ciudades