Zdravo! Kako si? Ahora empezamos hablando en bosnio, uno de los cuatro componentes del serbocroata, junto con el montenegrino. En esta variante, se escuchan más palabras de origen turco, persa y árabe. Espero que estés muy bien hoy. La semana pasada hablando de la migración al futbol australiano, en especial las comunidades serbia, croata, italiana y griega. Ahora saltamos al continente europeo, en particular a los Balcanes. Nos toca hablar de un país interesante desde el punto de vista sociopolítico, Bosnia y Herzegovina.
Recomendación musical 1
Una gran propuesta que se escucha en los Balcanes es la banda Dubioza Kolektiv. Originaria de Zenica, mezcla reggae, ska, hip-hop y rock, todo eso con un toque folclórico de Bosnia y Herzegovina. Esta banda surgió en 2003 con miembros de otras agrupaciones como Ornament y Gluho doba. Su objetivo ha sido combatir los estereotipos musicales de los Balcanes. Sus letras, en bosnio y en inglés, alumbran problemáticas de la sociedad bosnia y en todas las canciones hacen referencia a la legalización de la mariguana. Se han presentado en festivales como Glastonbury en el Reino Unido, y South by Southwest en Austin, Texas, pero también cantan en protestas por toda la ex Yugoslavia, como en Eslovenia (2012) y Macedonia del Norte (2015). Tan distintivo es su sonido como su vestimenta, una camiseta amarilla y negra a rayas. Te enseño la canción más vista suya por YouTube, Kažu (Dicen).
En esta ocasión, colabora Futbol Bosnio. Esta cuenta ha crecido a un ritmo vertiginoso explicando el futbol en este país lleno de talento para las cinco ligas grandes, pero con una liga que no levanta. En cuanto a la selección, ya logró meterse a un mundial de futbol y suele ser un equipo competitivo que en no pocas veces se ha quedado a la orilla. Desde Argentina, esta cuenta es pionera en este futbol tan singular no solamente en los Balcanes, sino en toda Europa. Puedes seguirlo en Twitter como @FBosnio. ¡Bienvenido!
Vamos al tema de esta semana.
Bosnia-Herzegovina, crisol de culturas en los Balcanes
Bosnia-Herzegovina. Ese destino que muy pocos conocen, pero que los que lo hacen se llevan una grata sorpresa. Musulmanes, ortodoxos, católicos, los judíos sefardíes sobrevivientes. Por aquí han pasado eslavos, alemanes, turcos, rumanos. Aquí vemos cúpulas de cebolla de las catedrales ortodoxas, puntas de los templos católicos y minaretes de las mezquitas. Un puente de ensueño que le da la bienvenida al río Neretva en Mostar. Posibilidad de ir a esquiar y de rafting en un mismo país, o de ver pueblos atascados en la Edad Media. Un país que lucha por salir adelante con el olor de cafés y ćevapi con yogurt en Sarajevo.
Bosnia-Herzegovina luce orgullosa las cicatrices de guerras que enfrentaron a una etnia y a otra por religión. Durante mucho tiempo fue el escenario de estira y afloja de la ONU, Estados Unidos y la Unión Europea. En medio, una población que ni siquiera vivía con lo necesario y moría de hambre, frío y desesperanza. En su paraje agreste se escucha todavía el lamento de las personas que perdieron a sus seres queridos, pero también se escucha el folclor heredado de las repúblicas balcánicas.
Como sea, Bosnia-Herzegovina tiene varias historias que contar si te detienes un segundo a escuchar el terror, la resiliencia, el optimismo y las ganas de tener un futuro brillante. Seas bosnio, croata o serbio, todos tienen cabida en este frágil entramado. De vez en cuando se reabren las heridas, y el futbol no es el paliativo de otros países, los cuales dejan de lado sus diferencias y se unen aunque sean 90 minutos.
El futbol en Bosnia-Herzegovina es excusa para seguir desunido dentro de una unión aparente. La selección es la menos apoyada del mundo, la liga ve a clubes serbios, croatas y bosnios, y más abajo se divide. Un país dividido en tres etnias y en dos entidades gubernamentales. Esto es Bosnia-Herzegovina.
¿Cómo llegamos a este punto?
Primero los ilirios, luego los romanos, más tarde los eslavos y rematamos con los cátaros… todo mundo pasaba por los Alpes llamados dináricos. La Edad Media fue un tiempo relativamente bueno para los bosnios bajo el gobierno de Bizancio a cargo de Ban Kulina. Comenzando en 1180, su punto más alto fue casi 1380 cuando el rey Tvrtko I conquistó Hum (ahora Herzegovina) y parte de Dalmacia, o la costa de Croacia. Esa época dorada acabó en 1463, cuando los otomanos finalmente se quedaron con todo el territorio.
El tiempo otomano fue bastante benévolo también para Bosnia. Ellos trajeron un islam bastante relajado, el sufismo, que llegó para quedarse, porque los bosnios lo adoptaron gustosamente… también influyó el tener más privilegios en la sociedad, pero una parte de siervos prefirió el catolicismo. ¿Con qué moneda le pagó Bosnia al Imperio? Con soldados. Los bosnios eran reconocidos por todo el Medio Oriente por su bravía. Había un regimiento llamado jenízaros, que eran niños bosnios reclutados por las buenas o por las malas. Su letalidad era incuestionable. ¡Hasta las mujeres musulmanas bosnias eran temidas en guerra! No solamente fue en la guerra. Varios bosnios se transformaron en intelectuales y filósofos que escribieron en turco, persa y árabe. Y los turcos les agradecieron embelleciendo las ciudades con puentes y mezquitas.
Esto duró hasta 1873. En la decadencia del Imperio Romano, las élites bosnio-musulmanas se negaban a modernizar el sistema feudal, y el sultán tenía una vida de lujos que se comía las aportaciones de su sociedad, por lo que incrementó los impuestos. Como al año siguiente las cosechas no fueron buenas, se dieron cuenta de que morirían de hambre si los pagaban. Así pues, los campesinos (bosnios cristianos) se rebelaron en 1875 y ahí empezó el historial de guerras en los Balcanes.
Aquí entra el Imperio Austrohúngaro, que con el congreso de Berlín se quedó de facto con Bosnia, pues en el papel aún seguía siendo provincia otomana. Los austrohúngaros llegaron con inversiones y desarrollo industrial, los jóvenes tendían a migrar a Viena. Y surgieron los nacionalismos: los católicos se identificaban con Croacia, también parte de Austria-Hungría; los serbios querían unirse a Serbia, recién independizada, y en medio estaban los musulmanes, que querían su propio grupo, los bosníacos.
Mientras el Imperio Otomano iba inminentemente a su implosión con la Revolución de Jóvenes Turcos, Austria-Hungría reclamó a Bosnia, dándole al traste a la gran Serbia; se desataron las Guerras Balcánicas entre 1912 y 1913, y no fue suficiente la tregua. ¿Por qué decimos esto? Un nacionalista serbio, Gavrilo Princip (Гаврило Принцип), tuvo el tino de dispararle en Sarajevo al heredero al trono austriaco, el duque Francisco Fernando, y no tuvo mucha consecuencia… más que desatar la I Guerra Mundial, donde murió el 15% de la población bosnia.
Acabó la guerra y con ella murieron los imperios austrohúngaro y otomano. Bosnia pasó al Reino de los Serbios, Croatas y Eslovenos, que en 1929 recibió el nombre de Yugoslavia (o el país de los Eslavos del Sur). Diez años de un país prometedor se vieron truncados cuando Hitler les cayó con toda la fuerza. Bosnia quedó con un estado títere nazi, el Estado Independiente de Croacia, gobernados por la Ustaša. ¿Para qué tener campos de concentración, si la misma Ustaša traía el infierno a la tierra? Diezmó a la población judía y asesinó a serbios. Los musulmanes también se la cargaron con los serbobosnios; los četnici hicieron lo propio contra los bosniacos.
Mientras guerrearon, los četnici y los partizanos comunistas liderados por Josip Broz Tito conformaron un movimiento de resistencia anti-nazi, y se beneficiaron de la orografía agreste de Bosnia. Aunque no lo parezca, en este país (ciudades de Bihać y Jajce) Tito y su Consejo Antifascista escribieron su constitución de una nueva Yugoslavia.
En teoría, todos los miembros de esas siete repúblicas eran reconocidos; en la práctica, los bosniacos no eran reconocidos por separado sino hasta 1971, año en el que por fin se definió la clasificación en musulmanes. Antes, o eran serbios, o croatas u otros yugoslavos. Esto es una manera de ilustrar que el gobierno de Tito tendía a fijarse más en Serbia o Croacia. No importaba que aportaban dinero con la minería al noreste. Tito quiso compensar cuando albergó con éxito los Juegos Olímpicos de Invierno en Sarajevo en 1984, pero no fue suficiente.
Yugoslavia mal que bien funcionaba… hasta que se murió Tito. Los rencores étnicos volvieron a encenderse. Para evitar esto, idearon que cada república tuviera el poder durante un año. Salió peor el remedio que la enfermedad. El presidente de Serbia Slobodan Milošević (Слободан Милошевић) empezó a apelar al nacionalismo serbio. Esto no cayó bien y en junio de 1991, Eslovenia y Croacia se separaron. En el primer caso, la guerra duró 10 días; para los croatas, empezaba otra lucha cruenta.
Bosnia-Herzegovina también quiso ser independiente y organizó un referéndum. El 99,7% estuvo a favor de la independencia, que se declaró el 3 de marzo de 1992. ¿Final feliz? ¡Para nada! los serbobosnios dijeron: “¡No tan rápido!”. No solamente boicotearon el referéndum, sino que establecieron un gobierno alternativo en Pale, 20 km al este de Sarajevo. Para cuando Bosnia-Herzegovina recibió el reconocimiento internacional (6 de abril), Sarajevo había sido sitiada por paramilitares serbios y el ejército de Yugoslavia. Y empezó de nuevo el terror en Bosnia-Herzegovina, ahora con una guerra civil, que duró tres años.
Como la siguiente semana hablaremos del episodio de Srebrenica, no entraremos en detalles con respecto a la guerra civil de Bosnia-Herzegovina. Solamente diremos que los odios entre bosniacos, serbios y croatas llegó a un punto de terror. El puente de Mostar fue bombardeado por croatas, por ejemplo. Se esperaba que la ONU fuera un mediador, pero su labor dejó mucho que desear. Los cascos azules neerlandeses no lograron parar el ataque a Srebrenica, la peor masacre cometida en Europa desde la II Guerra Mundial.
Todo “acabó” en 1995 con la conferencia de paz en Dayton, Ohio, entre las partes implicadas. A su paso hubo 250.000 muertos y más de 2,5 millones de refugiados.
Historia del futbol en Bosnia-Herzegovina antes de la independencia
El futbol llegó a Bosnia-Herzegovina para ser exactos el 11 de mayo de 1903. Un hombre llamado Bernard Leichner llevó una pelota desde Budapest. Dos años después nacería allí el HKD Hrvoje, el primer club bosnio. En 1912 se cambiaría el nombre a Gymnazijalni Nogometni Klub Zrinjski.
También en Mostar, pero en 1906, se fundó el Hrvatski radnički omladinski sportski klub (HROŠK Mostar), traducido al español como Club Deportivo Juvenil de Trabajadores Croatas. Este es el segundo club más antiguo. Ambos clubes se fusionaron en 1917 y surgió el Hercegovac.
Los clubes que surgieron en Bosnia-Herzegovina hasta 1932 obedecían a la diversidad y a la polaridad que había en el pasado. La diversidad nacional y la polaridad en el pasado fueron especialmente pronunciadas en los primeros años del fútbol en Bosnia y Herzegovina, formando así diferentes clubes: Jedinstvo Bihać, Sloboda Tuzla, Željezničar, Velež, Tomislav, Borac Banja Luka, y esto solamente es mencionar los clubes más famosos.
Vayamos a los tiempos de Yugoslavia. Para seguir con la idea de equidad entre nacionalidades, ningún equipo tenía una referencia hacia una etnia o religión. Todos los municipios yugoslavos tenían su equipo, Bosnia-Herzegovina no fue la excepción. Su asociación era miembro de la Asociación de Futbol de Yugoslavia, mientras que su campeonato local estaba dentro del rango de segunda división yugoslava.
¿Cómo le iba a los clubes bosnios en la liga yugoslava? En total, siete clubes participaron en al menos una temporada: Željezničar, Sarajevo, Velež, Sloboda Tuzla, Borac Banja Luka, Čelik Zenica e Iskra Bugojno. Dos clubes lograron ser los campeones de liga: Sarajevo (1965/66 y 1984/85) y Željezničar (1971/72). En cuanto a las copas, los vencedores fueron FC Velež (1981 y 1985) y Borac (1987).
En cuanto a la participación en Europa, podemos mencionar al Velež, que se metió a cuartos de final de la Copa UEFA en 1972, dejando en el camino al Spartak de Moscú, al Rapid de Viena y al Derby County. El Željezničar también llegó a la misma ronda ese mismo año (Brujas, Bologna y St. Johnstone de Escocia, cayendo con el Ferencváros). Y por si fuera poco, en 1985 alcanzó las semifinales de la Copa UEFA (Sliven, Sion, Universitatea Craiova y Dinamo Minsk). Y si hablamos de otras copas, está la Copa Mitropa, ganada por el Čelik (1971 y 1972, ganándole la final a la Fiorentina), Iskra Bugojno (1985) y Borac Banja Luka (1992).
Bosnia-Herzegovina es el tercer país que aportó más jugadores a las selecciones yugoslavas, por detrás de Croacia y Serbia, que siempre fueron los colosos de la zona. Algunos de esos grandes jugadores son: Ivica Osim (Ивица Осим), Vahid Halilhodžić (Вахид Халилхоџић), Hasan Salihamidžić (Хасан Салихамиџић), Enver Marić (Енвер Марић), Duško Bajević (Душко Бајевић), Franjo Vladić (Франњо Владић), Boro Primorac (Боро Приморац), Mehmed Baždarević (Мехмед Баждаревић), Faruk Hadžibegić (Фарук Хаџибегић) y Blaž Slišković (Блаж Слишковић).
Conformación de Bosnia y Herzegovina
Con el acuerdo de Dayton se instauró un gobierno rotatorio con representantes de las tres etnias que viven ahí. También mantuvo las fronteras que tenía Bosnia-Herzegovina durante los tiempos de la ex Yugoslavia. Luego, este acuerdo determinó que estaría dividida en dos entidades:
- La República Srpska (Република Српска, República Serbia). Ocupa el 48% del territorio y es para los serbobosnios.
- La Federación de Bosnia-Herzegovina. 50% del territorio y une a bosniacos y a bosnocroatas.
La Federación de Bosnia-Herzegovina tiene una superficie de 26.110 km² y una población de 2,86 millones de habitantes. Se divide en diez cantones, con su capital entre paréntesis. Cinco de ellos son de mayoría bosnia: Una-Sana (Bihać), Tuzla (Tuzla), Zenica-Doboj (Zenica), Podrinje Bosnio (Goražde) y Sarajevo. Tres son de mayoría croata: Posavina (Orašje), Herzegovina Occidental (Široki Brijeg) y el Cantón 10 (Tomislavgrad). Los dos restantes (Bosnia Central (Travnik) y Herzegovina-Neretva (Mostar)) son de ambos.
Mientras tanto, la República Srpska (24.811 km²) tiene una población de 1,44 millones de habitantes. En este caso, se divide en siete regiones: Banja Luka (Бања Лука, Banja Luka), Doboj (Добој, Doboj), Bijeljina (Бијељина, Bijeljina), Vlasenica (Власеница) (Zvornik (Зворник)), Sarajevo-Romanija (Сарајево-Романија) o Sokolac (Соколац) (Sarajevo Oriental), Foča (Фоча, Foča) y Trebinje (Требиње, Trebinje).
Mapa 
Bandera
En 2000 surgió un distrito autónomo llamado Brčko (Брчко). Oficialmente es un territorio compartido por ambos gobiernos; en la práctica, funciona de manera autónoma. Ocupa el 2% del territorio y surgió porque fue el único punto que no se solucionó en el Acuerdo de Dayton. Empezó con un gobierno internacional, el cual acabó en 2012. Es famoso en el círculo de internacionalistas de Europa y Estados Unidos porque es una especie de laboratorio para lo que pueden lograr programas de cooperación internacional para desarrollo, como la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y la Dirección General de Protección Civil y Ayuda Humanitaria de la Unión Europea.
Esta configuración se refleja en el futbol de Bosnia-Herzegovina.
Organización de la liga de Bosnia y Herzegovina
En la actualidad, la liga de Bosnia-Herzegovina se compone de 12 equipos, que juegan entre sí tres veces. El campeón va a primera ronda previa de Champions League, mientras que el segundo y tercero califican a la primera ronda de Conference League, al igual que el ganador de la copa. Los dos últimos descienden. Aquí va la lista organizada por ciudades:
- Banja Luka: Borac
- Krupa na Vrbasu: Krupa
- Doboj: Mladost Doboj Kakanj
- Bijelina: Radnik Bijeljina
- Tuzla: Sloboda y Tuzla City
- Mostar: Velež y Zrinjski
- Široki Brijeg: Široki Brijeg
- Sarajevo: Željezničar, Olimpik y Sarajevo
Todas las etnias que componen al país (Bosníacos, Bosnio-Croatas y Serbo-Bosnios) se encuentran bien representadas:
- Equipos serbios: Borac (Борац), Krupa (Крупа) y Radnik (Радник)
- Equipos croatas: Široki Brijeg y Zrinjski
- Equipos bosníacos: Sloboda, Velež, Mladost, Tuzla City, Željezničar, Olimpik y sobre todo el Sarajevo.
Desde el año 2000 que la liga se juega de esta manera, aunque de 1995 a 1999 en Bosnia-Herzegovina solía haber tres ligas, cada una correspondiente a la composición étnica. Al haber en esos años tres campeones de liga que no se enfrentaban entre sí, la llegada del futbol Bosnio a las competiciones europeas debió esperar.
La primera de las 3 ligas en comenzar fue la bosnocroata, que tuvo su comienzo en la temporada 93/94. La misma fue ampliamente dominada por el NK Široki Brijeg, que logró hacerse con los primeros cinco campeonatos. Dos años después se dio el comienzo del campeonato bosníaco, que contó con diversos campeones, siendo el Čelik (Zenica) el que más títulos logró (3).
El campeonato de la República Srpska arrancó un año después del bosníaco y fue el único que siguió después del arranque del torneo unido, ya que este se dio por finalizado en 2002.
El primer equipo bosnio en representar al país fue el NK Brotnjo (Čitluk), equipo de origen croata que fue campeón del último campeonato que no contenía a los equipos de origen serbio.
A pesar de que en la máxima categoría de Bosnia-Herzegovina se enfrentan entre sí los diversos clubes de las tres etnias, en el ascenso esto no es posible. Como si fuera, por dar un ejemplo, la B Metropolitana y el Federal A de Argentina, en Bosnia el ascenso está dividido por 2 ligas, una con clubes bosníacos y bosnocroatas y otra sólo con equipos de la República Srpska. Estas mismas se encuentran con 16 equipos que combaten entre sí por un único ascenso: el campeón de cada liga. El distrito de Brčko compite en el sistema de la República Srpska.
La trágica historia del futbol en Mostar
Si tenemos que destacar un dato que compone a la lucha étnica del país, ese debería ser el derbi de Mostar entre el Zrinjski y el Velež. Tras el final de la II Guerra Mundial, el club sufrió una suspensión por ser un equipo de índole nacionalista, la cual duro desde 1945 hasta 1992. Su histórico clásico, el FK Velež Mostar, fue uno de los equipos bosnios más fuertes en esa etapa, en la cual el país formaba parte de la Yugoslavia comunista. El Velež, hermanado con las ideas que profesaba el gobierno formado por el mariscal Tito, logró pelear varios campeonatos. Los dos clubes históricos de la ciudad se habían enfrentado por última vez en 1938, y debieron esperar hasta el año 2000 para volver a verse las caras.
Durante los años 90, cuando ya había estallado la guerra en el suelo bosnio, la ciudad de Mostar fue ocupada en parte por el ejército croata, que creó en esos años la República de Herzeg-Bosnia. Con la ocupación ya dada, el Bijeli Brijeg, la casa del club desde 1958, quedó en la zona croata de la ciudad, por lo que el club perdió su casa y sus históricos terrenos, quedando éstos en manos del Zrinjski Mostar, que estaba en su renacimiento tras 47 años de suspensión. Quedando sin estadio y casi sin recursos, el Velež Mostar recién pudo tener su nuevo estadio (Stadion Rođeni) en 1995, quedando este en la parte mayormente habitada por bosníacos de la ciudad.
Hoy en día, varios fanáticos del club e históricos futbolistas de la etapa yugoslava siguen reclamando por la vuelta del Velež a su estadio original, pero este reclamo no es tomado por las autoridades dado los problemas que ello podrían implementar.
Con su regreso al futbol, el Zrinjski es el único en haber logrado un tricampeonato. Por su parte, el Velež Mostar no ha podido igualar sus logros en la etapa yugoslava, habiendo sufrido ya varios descensos de categoría y sin todavía poder llegar a las competiciones europeas.
¿Qué rivalidades hay hasta el momento?
Siguiendo en la línea de rivalidades étnicas, son muy fuertes los enfrentamientos entre los clubes de Sarajevo y el Borac de Banja Luka, el equipo más representativo de la República Srpska. Estos mismos han sido notables en los últimos años, en los cuales el Borac se ha hecho un habitué de la Premijer Liga y hasta ha peleado por el título en varias ocasiones, lográndolo en la temporada 10/11. Por si fuera poco, la capital de República Srpska es la parte oriental de Sarajevo, pero realmente su centro neurálgico es Banja Luka porque la parte sarajevita que le corresponde a los serbobosnios es pequeña.
La gran mayoría de los clubes de la actual máxima categoría cuentan con una fuerte rivalidad entre sí, entre las que también podemos destacar la del Borac con el Zrinjski o el Široki Brijeg, es decir, serbios contra croatas. Los clubes de Sarajevo cuentan con una fuerte rivalidad con estos dos últimos, además de con el Velež Mostar, aunque esta solamente de manera futbolística.
¿Ha habido alguna rivalidad étnica bosnia que se haya extrapolado internacionalmente? Por supuesto; hay que ir a una histórica que ocurrió en el año 2007: El Zrinjski Mostar, étnicamente croata, se enfrentó con el Partizan de Serbia por la primera fase clasificatoria a la Europa League. En ambos partidos el equipo serbio fue muy superior, derrotando por un global de 11 a 1 a su par de Bosnia-Herzegovina. Lo que destaca fue el encuentro de ida, en el que hubo un duro enfrentamiento entre ambas hinchadas fuertemente nacionalistas. Tras estos incidentes, la UEFA decidió expulsar al conjunto serbio de la UEL, echándoles la culpa del comienzo de los enfrentamientos. Por lo tanto, el Zrinjski Mostar logró pasar de fase.
Letargo de la Republika Srpska
Si nos vamos al palmarés, observamos que los máximos ganadores son el Željezničar y el Zrinjski, con seis títulos cada uno, seguido por el Sarajevo (5) y a lo lejos el Široki Brijeg (2). En total, la Federación de Bosnia-Herzegovina acapara 14 campeonatos de 17, mientras que Republika Srpska tiene los restantes, con el Borac Banja Luka, Modriča (Модрича) y Leotar (Леотар) Trebinje con uno cada uno.
Hoy en día, en la máxima categoría de Bosnia se encuentran solo tres equipos de Srpska, y dos de ellos están hundidos de lleno en la lucha por el descenso. El Borac Banja Luka ha sido históricamente el único club fuertemente destacado de la zona, llegando a ganar una Copa Yugoslava y la liga de Bosnia en el año 2010, así como también una Copa Bosnia.
Desde el 2015 hasta acá el Borac ha sido bastante irregular, sufriendo dos descensos pero volviendo rápidamente. El último año el club logró quedar cuarto en la Premijer Liga y volver a Europa tras siete años, en donde cayó de manera agónica ante el Río Ave de Portugal, que después supo complicar al AC Milán. En el actual campeonato, el Borac está luchando por mantener su plaza en Europa, pero las lesiones y los malos resultados cuando salen de casa los están dejando a medio camino. Recientemente la dirigencia despidió a Vlado Jagodić (Владо Јагодић) (histórico del club) y contrató a Marko Maksimović (Марко Максимовић), quien no ha tenido una buena pretemporada.
En cuanto al Krupa y al Radnik de Bijeljina, se encuentran penúltimo y antepenúltimo en la tabla respectivamente, por lo que se prevé que pelearán por no descender hasta el final. El Krupa está considerado como un equipo que está en constante crecimiento y que hace años no solía aparecerse por la máxima categoría. Por otra parte, el Radnik de Bijeljina disfruto de una muy buena etapa bajo el liderazgo del su ya ex-presidente Mladen Krstajić (Младен Крстајић) (DT de Serbia en Rusia). Con Krstajić el club logró el primer y único título de su historia, la Copa de Bosnia en 2016. Otro de los problemas del fútbol de Srpska es que, al no tener las condiciones económicas o edilicias, los jugadores se terminan marchando a clubes en Bosnia que sí los tienen. Un ejemplo podría ser Gojko Cimirot (Гојко Цимирот) o Marko Mihojević (Марко Михојевић), ambos nacidos en el FK Leotar y traspasados al Sarajevo, en donde brillaron y pudieron llegar a otras ligas Europeas.
Hoy el Borac cuenta con un proyecto serio al que le falta el éxito deportivo. Seguramente al final de la temporada el club venda a Jovo Lukić (Јово Лукић), su principal figura, por lo que el éxito podría tardar aún más en llegar a la República Srpska, la cual ya ha logrado llegar a la cima en diversas oportunidades pero que ve desvanecerse sus chances de volver,
¿La selección menos apoyada de un mundial?
Cada etnia suele apoyar a tres equipos distintos, por más que habiten en un mismo país. La gran mayoría de los serbobosnios sigue a Serbia y siempre espera a que Bosnia-Herzegovina caiga o no clasifique a las competiciones. Del lado croata la cosa es parecida, aunque no existe tanto odio entre sí; ambos países han superado de una mejor manera sus diferencias.
El único mundial al que ha calificado Bosnia-Herzegovina es Brasil 2014. Logró ganar un grupo con Eslovaquia, Grecia, Lituania, Letonia y Liechtenstein, de una manera por demás dramática, ganando a Lituania en Kaunas. Ese 15 de octubre de 2013 quedó grabada en la retina de toda Bosnia-Herzegovina… ¿o no? La TV de Srpska ni siquiera pasó el partido, y en las principales ciudades no hubo ni festejos ni incidentes, fue como si no pasara nada. El contraste total fue en Sarajevo o Tuzla, en donde la gran mayoría llenó las calles para celebrar y esperar al equipo en su vuelta hacia el aeropuerto Butmir. No era para menos, los serbobosnios estaban que no los calentaba ni el sol: en su grupo eliminatorio Serbia quedó fuera porque perdió el boleto del repechaje contra sus vecinos incómodos los croatas (Bélgica no cuenta; fueron demasiado poderosos). ¿Hay mayor humillación que ésta?
En el mundial quedó en el grupo F con Argentina, Nigeria e Irán. Perdió los dos partidos contra la albiceleste y las Superáguilas. Salió una nota en periódicos diciendo que los Zmajevi (dragones en bosnio) fueron la selección menos apoyada. Hay cierta verdad en esta premisa: el autogol de Sead Kolašinac y los goles de Messi y Peter Odemwingie sonaron fuerte en Banja Luka o Bijeljina. ¿Y los croatas? Apoyaban a su selección, competitiva en Europa y el mundo, aunque algunos también siguieron a Bosnia y el ejemplo está en la ciudad de Mostar, partida entre bosnios y croatas. La victoria 3-1 sobre Irán no logró meterlos a octavos de final; por cierto, ese partido se jugó tres días antes de que se conmemoraran 100 años de que Gavrilo Princip baleó al archiduque Francisco Fernando.
A pesar de estas históricas luchas entre las tres etnias del país, muchos futbolistas de origen croata y serbio han decidido representar a Bosnia, algunos llegando incluso a ser grandes ídolos del país. Como ejemplos de estos podemos citar dos ejemplos:
- Emir Spahić, bosnocroata, nacido en Dubrovnik y capitán de Bosnia en el Mundial.
- Zvjezdan Misimović (Звјездан Мисимовић), serbobosnio, quien nació en Alemania y había llegado a representar a Serbia y Montenegro a nivel juvenil, pero que logró ser convencido por Hasan Salihamidžić, quien era compañero en el Bayern, de representar a Bosnia-Herzergovina.
Otros futbolistas nacidos en Srpska que han representando a Bosnia con creces han sido Vedad Ibišević (Ведад Ибишевић) y Asmir Begović (Асмир Беговић), aunque ambos profesan la religión musulmana y no tienen mucho que ver con el lugar donde nacieron.
Vale la pena recordar un hecho ocurrido a finales de 2018 con un central de Bosnia: Ognjen Vranješ (Огњен Врањеш). El futbolista nació en Banja Luka y representó a Bosnia en 2014, pero fue corrido de la selección en 2018 tras tatuarse el mapa de la República Srpska y a un sacerdote militar de Serbia. Su nacionalismo y militancia lo llevó a tener problemas con los hinchas y con varios futbolistas de la selección. Actualmente Vranješ se desempeña en el Charleroi de la Jupiler Pro League. Este ha sido que yo sepa el único escándalo fuertemente influenciado por lo etnico en la selección.
Como hemos dicho, varios futbolistas de Croacia o Serbia han representado a Bosnia sin ningún problema.
- Croatas: Jasmin Mujdža, Mirko Hrgović, Elvis Sarić, Ivan Radeljić, Marko Vrančić, Branimir Cipetić, Ivan Medvid, Luka Menalo, Dario Purić y Dragan Stojkić.
- Serbios: Ninoslav Milenković (Нинослав Миленковић), Dušan Kerkez (Душан Керкез), Almir Gredić (Алмир Гредић, Albin Pelak (Албин Пелак), Vladimir Karalić (Владимир Каралић), Ilija Prodanović (Илија Продановић) y Almedin Ziljkić (Алмедин Зиљкић).
Situación actual del futbol bosnio
En general, los clubes de los Balcanes extrañan los tiempos de la antigua Yugoslavia, en el sentido de que era una liga competitiva en Europa y no era raro meter sustos a otros equipos más consagrados. En Bosnia-Herzegovina sienten esa falta más que nadie: la fuerte migración que se dio antes y después de la guerra hace notorio esto. Si analizamos al seleccionado bosnio que llegó al Mundial 2014 podremos ver que la gran mayoría se crió o nació fuera del país, lo que hace notar aún más la falta de calidad del fútbol local en esos años. Hoy en día, esto ha empezado a cambiar para bien; de todos modos, Bosnia-Herzegovina es uno de los tres países de la ex Yugoslavia que todavía no puede meter ningún equipo en las fases de grupos de la Champions o de la Europa League, junto con Montenegro y Kosovo. Hay que decir que Montenegro empezó a competir en 2016, y Kosovo en 2015. Lo más lejos que han llegado es a la tercera ronda previa en Champions League (Željezničar en 2002) y la cuarta ronda previa en Europa League (Sarajevo en 2014).
Hay proyectos ambiciosos como los del FK Sarajevo que podrían lograr romper la mala racha y esperemos que así sea, pero hoy en día futbolisticamente Bosnia está por debajo de por ejemplo la liga eslovena, país al que solía superar en la era de Yugoslavia. De acuerdo con el ránking UEFA, la Premijer Liga se encuentra en el lugar 36 de 55. Históricamente, la solución a estos problemas podría ser un mayor apoyo de la federación a los clubes, ya que muchos no cuentan con instalaciones idóneas ni estadios habilitados por la UEFA.
Parece ser que la única certeza que tenemos de cara a los próximos años es la diferencia que podría sacar el FK Sarajevo por sobre sus rivales. Con la llegada del capital asiático (Sus últimos dos presidentes vienen de Malasia y Vietnam), el club ha renovado todas sus instalaciones y sacado una gran diferencia en cantidad y calidad de plantel con el resto de los equipos de la Premijer Liga, incluido su clásico contra Željezničar. En estos últimos años el equipo se ha reforzado de gran manera, llegando al equipo jóvenes promesas como Besim Šerbečić (Rosenborg) o Zinedin Mustedanagić (Sparta Praga), así como también futbolistas de nivel como Jasmin Mešanović (NK Maribor) y Tino Sušić, quien fuera parte del plantel bosnio en Brasil 2014.
Los equipos clásicos de la liga como el FK Željezničar, HSK Zrinjski Mostar, FK Velež Mostar y FK Sloboda Tuzla se decantan más por la formación de futbolistas propios de sus inferiores, ya que económicamente no están logrando un buen pasar. En los últimos años varios futbolistas formados en las juveniles de estos cuatro clubes han logrado traspasos al exterior, siendo en este caso el Željo el que más ha aportado a esta situación. Aquí surgió el Diamante Bosnio (Bosanski Dijamant) Edin Džeko. Y también cabe destacar que en Bosnia comenzaron su andar por el futbol profesional una estrella de calibre monumental, Luka Modrić, cedido al Zrinjski Mostar.
¿Recuerdas que te contamos que los bosnios eran apreciados en el Imperio Otomano por su bravía? Tenemos a un jenízaro actual en el futbol: Edin Višća. Surgido en el Budućnost de Banovići y migrado al Željo, lleva ya 10 años en el futbol turco, solamente en el İstanbul Başakşehir. Pieza clave para el ascenso y la conquista de liga, Višća ha sido el máximo asistidor en la Süper Lig tres años consecutivos. Como es musulmán, no ha tenido dificultad en adaptarse a la vida en Turquía, concediendo incluso entrevistas hablando en turco fluidamente. Un soldado bosnio dominando Estambul… suena a una historia ambientada en el siglo XVII o XVIII, y eso es lo que hace Višća.
Y es que Bosnia-Herzegovina aún tiene su caché y su magia, como una perla escondida en el fondo del mar. Lo ha dicho su escritor más famoso, Ivo Andrić:
Što se mene tiče, bez preterivanja, bih mogao reći da sam mnogo toga naučio od običnog nepismenog čoveka iz Bosne.
En cuanto a mí, sin exagerar, podría decir que aprendí mucho de un analfabeto común de Bosnia.
Kakvo je to bogatstvo jezika i izraza! Beležio sam, proučavao, nastojeći da bar ponešto preuzmem od mudrosti našeg sveta.
¡Qué riqueza de lenguaje y expresión! Tomé notas, estudié, tratando de sacar al menos algo de la sabiduría de nuestro mundo.
¡Muchas gracias por pasarte por acá, Futbol Bosnio! ¡Eres bienvenido cuando quieras!
Fuentes
Lonely Planet. Historia de Bosnia y Herzegovina. Constante actualización
Bosnapress. Fudbal u BiH kroz historiju: Ko je najstariji klub u BiH? 20 de agosto de 2015
RTVBN. Analiza: Zašto je Srpska lošiji dio BiH u fudbalu?! 31 de octubre de 2015
Padilla, Toni. Partido Polish Boyfriend: El derbi que se juega encima de un puente. MarcadorInt. 30 de octubre de 2020
Montague, James. Bosnia, la selección mundialista que encontró unidad a través del futbol. Expansión. 2 de junio de 2014
Nos quedaremos en Bosnia y Herzegovina, pero tocará revivir una cicatriz del pasado. Este país sufrió el peor holocausto de los últimos 40 años en Europa, la masacre de Srebrenica. Dos religiones aparentemente separadas por el horror, pero lejos de eso, el futbol ha dado un nuevo realce a una reunión ecuménica, con el equipo FK Gobar. Esa historia te la traigo la siguiente semana.
Recomendación musical 2
Si hay un bosnio que se ha ganado el reconocimiento mundial a punta de trabajo duro es el director de cine Emir Kusturica (Емир Кустурица). Famoso en Latinoamérica por el documental de Maradona, tiene otras joyas cinematográficas que no escatimaban en referencias a la vida cotidiana de Bosnia-Herzegovina, como Underground, ganadora de la Palma de Oro en el Festival de Cannes. Su banda sonora estaba a cargo del músico bosnio más famoso del mundo, Goran Bregović (Горан Бреговић). Nacido en Sarajevo de familia serbia, ha puesto a bailar a todo el mundo hastiado de música pop anglófona. Desde el festival de truba en Guča, Serbia, hasta prestigiosos escenarios como el Carnegie Hall, Brega transforma cada concierto en una borrachera, con ritmos frenéticos. Me cuesta trabajo poner solamente una canción, pero me he decidido por una canción de esa película exitosa: Mesečina (Месечина, Luna pequeña).
Recapitulemos
Bosnia-Herzegovina es un país con cicatrices de muchas guerras: rebelión de campesinos, Guerra Balcánica, I Guerra Mundial, II Guerra Mundial… El más reciente ha sido la Guerra Civil en Bosnia, con consecuencias nefastas para la sociedad. Las tensiones tienen orígenes étnicos. Aquí viven bosniacos, serbios y croatas. El acuerdo de Dayton (1995) definió que Bosnia-Herzegovina tiene dos gobiernos: la Federación de Bosnia-Herzegovina (bosniacos y bosnocroatas) y la República Srpska (serbobosnios). El futbol en Bosnia-Herzegovina fue competitivo dentro de la liga yugoslava, con clubes como Željezničar, Sarajevo, Velež y Sloboda Tuzla. Ahora su liga no es tan fuerte (lugar 36). Sus 12 equipos representan a las tres etnias, pero en divisiones inferiores están partidas por repúblicas. Esto da pie a rivalidades, como el derbi de Mostar (Zrinjsi vs. Velež) y clubes de Sarajevo contra Republika Srpska, en letargo actualmente (Željezničar y/o Sarajevo vs. Borac). Bosnia-Herzegovina solamente ha calificado a un mundial: Brasil 2014. Es la selección menos apoyada, porque los serbios quieren que pierda y los croatas apoyan a su selección, pero representantes de ambas etnias no tienen miramientos en jugar para Bosnia (exceptuando el caso de Ognjen Vranješ). Con la llegada de capital malayo y vietnamita, el Sarajevo podría llegar a fase de grupos de competencia europea, mientras que otros clubes se enfocan a desarrollar jugadores, como Edin Džeko, Edin Višća o Luka Modrić.
Nos vemos la siguiente. Zbogom!
