Las campeonas olímpicas visitaron el país para cerrar el último ciclo de partidos amistosos ante la selección nacional femenil mexicana. El equipo de Mónica Vergara cerró con dos resultados importantes, aunque, existieron momentos de duda de cara a lo ya mostrado en otros juegos.
Estos fueron los puntos que dejaron ambas selecciones durante el par de encuentros.
La victoria en el CAR
Canadá se ha caracterizado por ser una selección que disfruta estar sin balón, pragmática pero sin necesidad de ser tan reactiva, y es que, cuando hay momentos de dominar con la posesión, realizan toques rápidos al juntar a sus mediocampistas y suman altura con sus laterales.
Para este partido, modificaron su formación inicial (4-3-1-2) y fue hasta el minuto 60, con desventaja de dos goles, donde mostraron su mejor faceta. Sumado a como México modificó su plan inicial con el pasar de minutos, bajando ritmo de presión y esperando en su mediocampo.
Con la cantidad de cambios debido al tono amistoso del partido, la entrada de jugadoras como Alicia Cervantes y Yamile Franco, se dio a entender el cambio de plan, menos posicional, más bloque medio y esperar que los apoyos de Licha ayudaran al equipo, cosa que funcionó por bastantes lapsos.
Cuando Canadá volvió a su raíz del 4-3-1-2, Itzel González dejó al menos tres atajadas clave para mantener algo más que un empate, con la oleada de pases y llegadas por fuera del equipo dirigido por Beverly Priestman. México sobrevivió a unos minutos finales donde se vieron superadas.
Un empate que puede predecir cosas
Para el segundo encuentro en la Ciudad de los Deportes. México presentó cambios en el esquema, siguió estando a la espera de su rival e intentó sumar desde las salidas o reinicios de juego en su campo, sin embargo, se vio sencillo de descifrar y por ello, Canadá tuvo mejores momentos durante el juego.
¿Cómo Canadá puede evitar las salidas de México?
Las jugadoras de Priestman tienen más que establecidas las zonas altas para recuperar balones, se necesita mucho para llevar a cabo ese tipo de acosos (previo al pase), como interpretación a la hora de realizarlos, ya que, el equipo quedaría expuesto de librarse de ellas. Suecia y Estados Unidos sufrieron de esto en sus partidos durante Tokyo 2020.
En un balance general. México ha competido ante una selección más que establecida, el nombre podría asustar a algunos tanto, así que, salir con el resultado a favor debe llenar las expectativas de quienes no creen en el equipo. De a poco se nota las fases donde el equipo comienza a ser constante.
El próximo año será el de máximo reto con las eliminatorias rumbo al mundial y sobre el camino, ajustar situaciones como la dirección de campo, salidas y el tan ansiado once inicial, aunque depende también de las jugadoras elegidas. Falta tiempo para darle una evaluación total al proyecto que, eso si, se está encaminando.