HISTORIAL
CLASIFICÓ VÍA PLAY-OFFS
¿CÓMO JUEGA?
La República de Macedonia del Norte será el combinado nacional más modesto e inesperado que acudirá acreditado a la primera fase final de Eurocopa en sus 27 años de historia como selección independiente. Antes de esta repesca vía Nations League, lo más cerca que estuvo de pisar una fase de grupos final fue en la edición de 2008, donde venció por 2-0 a Croacia, empató (0-0) en Wembley ante una Inglaterra que posteriormente se quedó fuera también y donde sumó 14/36 puntos, diez menos que Rusia (2ª de grupo). Por aquel entonces, Goran Pandev ya vestía los colores de la absoluta, a sus 24 años.
Es una de las dos debutantes –junto a Finlandia–, que parte con el cartel de cenicienta, pero con argumentos para no terminar con su casillero a cero y dejar un sabor de boca que supere las expectativas. Aunque en partidos donde ha tenido que llevar la iniciativa –como por ejemplo frente a Liechtenstein– mostró un plan alternativo en 4-2-2-2, parte de un 3-1-4-2/5-3-2 muy asentado y resulta una selección pragmática ante todo, que prioriza el orden. Destaca a balón parado, gracias al buen pie diestro de Bardhi y la zurda de Alioski.
A la hora de atacar intentan salir jugando desde atrás, con un mecanismo interesante donde Ademi –mediocentro de contención en fase defensiva– abandona con asiduidad la base para que ahí aparezcan Elmas y, especialmente, Enis Bardhi, que son sus jugadores de mejor pie. Esto sucede siempre que el adversario no presione, en cuyo caso su plan A pasa por el juego en largo hacia la doble punta, para la recepción de espaldas y segunda jugada donde se incorporen sus tres centrocampistas, que tienen mucho potencial sumándose a la ofensiva y llegando al balcón del área.
El gran hándicap de esta puesta en escena reside en que sus delanteros no se imponen en las disputas aéreas con facilidad, por lo que puede sufrir en contextos donde tenga que atacar sin que el rival le ceda la iniciativa. De hecho, el acompañante de Pandev, que venía alternándose entre Trajkovski y un Nestorovski que no estará en esta cita histórica por culpa de una lesión en el ligamento cruzado anterior, tampoco son piezas que se impongan por alto en juego directo. Por bandas es un equipo con limitaciones, ya que todo el espacio es para sus carrileros: el propio Alioski sí puede conducir, asociarse o incluso finalizar jugadas con último pase y/o tiro; pero desde la derecha, Ritsovski cuenta con más irregularidades técnicas –aunque en ocasiones pone buenos centros laterales– y necesita tener espacios cuando recibe para sumar en ataque.
Sin balón es una selección que prioriza superpoblar el carril central como muestra su dibujo y que, salvo que reciban los laterales o carrileros rivales, no les encima. Tiene tramos donde adelanta líneas, trata de impedir que el rival progrese por dentro –en saques de puerta, sobre todo–; pero lo habitual es verla replegar en un bloque medio. Otro de los puntos débiles con los que cuenta es la ausencia de un mediocentro natural, ya que Ademi acostumbra a ser un interior de recorrido en el Dinamo Zagreb y tiende a desproteger la zona entre líneas si es atraído. Consecuentemente, Velkovski es quien achica siendo el central del medio para aprovechar su determinación ejecutando coberturas y realizando entradas. También Musliu, aunque normalmente juega por izquierda –alternativa para el eje– y es ahí donde tiene que proteger la espalda de un Alioski también impetuoso a la hora de defender. Otro de sus déficits puede estar en la falta de fondo de armario defensivo, maniatando a Angelovski en escenarios donde sus tres centrales estén mermados físicamente o amonestados. La polivalencia de Ristovski será importante para paliar dicho aspecto.
XI TIPO
Ristovski es un fijo para Angelovski, pero varía entre defensa central derecho o carrilero, por lo que son Betjulai y Nikolov quienes, siendo perfiles muy diferentes, compiten por un puesto en el once. En caso de que Bardhi no llegue a tiempo o no esté en forma tras superar ya el COVID (convocado, pero ausente en los amistosos previos por COVID), Nikolov ocuparía el mediocampo que es su posición natural. Es el multiusos normacedonio. Como segunda opción está Spirovski.
FIGURA
GORAN PANDEV
A sus 37 años, todavía siendo un activo importante en el Genoa, Goran acude al evento futbolístico más importante de su carrera después de que un gol con su firma clasificase a los suyos en la final de la repesca ante Georgia. Y es que, pese a que ya es el máximo goleador histórico de su país (30), y a que nadie suma tantas internacionalidades como él (134 desde su debut con 17 años), aún parece tener cuerda para rato. Siendo la referencia ofensiva, —físicamente ya algo limitado— maneja todo tipo de recursos para proteger el cuero. Oxigena a sus compañeros, mejora permanentemente las jugadas y permite que el equipo se asiente en campo rival para que, una vez ahí, estos le retroalimenten y pueda marcar diferencias cerca del área rival. También es capaz de jugar a pocos toques y cuenta con una definición notable. Ya no tan autosuficiente, pero a inteligencia pocos le ganan cerca y lejos del área.
PROMESA
ELJIF ELMAS
Hablar de la joven promesa de la República de Macedonia del Norte y no hacerlo de un Bardhi que se destapó en el Europeo sub 21 de 2017 como el diamante, habla a las claras de que otro talento precoz viene haciendo todavía más ruido. Con cuatro años menos que Enis, a sus 21, el centrocampista firmado hace dos campañas por el Napoli tiene la capacidad para comandar y acelerar los ataques del combinado normacedonio. Una pieza que puede descender a la base de la jugada, pero que habitualmente busca recibir a espaldas del mediocampo rival, en 3/4, para acelerar en conducción, atraer miradas y liberar al compañero, o plantarse en la frontal y sacar a relucir su gran disparo de media distancia.
ENTRENADOR
IGOR ANGELOVSKI
Segundo entrenador más joven de esta Eurocopa, con 45 años, uno más que Andriy Shevchenko (Ucrania). Comenzó su carrera profesional en el mundo de los banquillos nada más colgar las botas en el FK Cementarnica 55 (Skopje), uniéndose al FK Rabotnički Skopje como director deportivo. Tras cinco años, dio el salto al banquillo de ese mismo club y llevó a los suyos a la consecución del campeonato en la 13/14 y un subcampeonato en la 14/15 en sus dos temporadas al frente, que son los mayores logros de la entidad capitalina en la última década. Así fue como se ganó una oportunidad al frente la selección absoluta, primero unos meses a la sombra de Ljubinko Drulović, y cuando este se marchó al FK Partizan de Belgrado, cogió las riendas del combinado nacional en octubre de 2015, dispuesto a hacer historia.
