En una jornada con varios futbolistas destacables, hay que poner la lupa sobre un chico que, luego de estar cedido las anteriores campañas en el Charlton Athletic y Swansea en Championship, dio el salto a Premier en calidad de cedido en el West Bromwich Albion y Crystal Palace. Ahora, le ha tocado un mayor reto: intentar consolidarse en el primer equipo del Chelsea.
Hay veces en las que un cambio de entrenador puede servirle a un jugador para revertir su situación, ya sea con mayor protagonismo, implicando más minutos o con un posicionamiento distinto al que tenía anteriormente, y la llegada de Potter a Londres, de momento, le está favoreciendo a Conor.
El pasado sábado presenciamos el primer gran encuentro del inglés con la elástica blue. Fue ante el Wolverhampton cuando Gallagher tuvo un contexto idóneo, jugando como mediapunta por detrás de Kai Havertz y con libertad para aparecer como interior por derecha en fase ofensiva, conectando en múltiples jugadas con Azpilicueta.
El inglés es el jugador que más ayuda en la presión, tanto en presión tras pérdida como en presión durante la construcción del rival. Además, ganó un cuerpo a cuerpo contra Adama Traoré, lo cual habla muy bien del ímpetu y capacidad física de Conor. La intensidad que muestra en el juego es clave para los blues.
El Chelsea en varias situaciones atacó por el sector diestro, con la ayuda del ex del Crystal Palace, el cual iba formando triángulos con Havertz y Mount.
La disposición táctica se asemeja a la que quiere Potter, dado que solía utilizar una similar en el Brighton. Idealmente, Gallagher juega más cerca del «5» y los dos interiores son un poco más profundos para formar un cuadrado (Loftus-Cheek con Jorginho y Gallagher al lado de Mount). Ni Ruben ni Conor son pivotes, y no son excelentes durante la construcción, lo cual no facilita el trabajo de Potter, pero cuando el Chelsea tenía el balón, a veces Loftus-Cheek caía más profundo, colocándose al lado de Jorginho y permitiendo que Gallagher se lanzara hacia adelante con libertad.
Graham Potter jugó con una formación híbrida de 4-2-3-1 y 3-4-3 contra Wolverhampton Wanderers. 4-2-3-1 cuando el Chelsea tenía el balón y 3-4-3 cuando no disponía del esférico, siendo flexible con sus piezas.
No se entiende la victoria del Chelsea antes los Wolves esta semana sin la figura del inglés. Es el típico jugador que a todo entrenador le gustaría tener en su equipo, la definición perfecta de box-to-box. Además, posee un compromiso defensivo tremendo.
Hasta ahora, Potter ha utilizado una mezcla de experiencia y juventud. Jugadores como Mason Mount, Reece James, Conor Gallagher, Ruben Loftus-Cheek y Trevoh Chalobah han desempeñado un papel importante desde su llegada. El ex técnico del Brighton valora a los jugadores de la academia y sabe que pueden desempeñar un papel clave en el éxito del club. La sensación es que Conor tendrá mayor protagonismo que con Tüchel, habrá que seguir de cerca su progresión.
¿Lo veremos en Qatar? Pronto lo descubriremos…
