En la vigésimo segunda jornada de la Premier League hubo nuevamente una actuación colectiva sobresaliente del Bournemouth de Andoni Iraola con la victoria 1-4 en casa del Newcastle United. En este encuentro, brilló Justin Kluivert con un hat trick y una asistencia.
Sabemos que el Bournemouth de Iraola plantea partidos de alta intensidad; y ahí el rendimiento de Kluivert sin el balón fue vital, especialmente contra un centro del campo tan físico como el del Newcastle.
«Kluivert estuvo muy bien marcando goles, eso es lo que siempre nos fijamos primero, y además no fue un triplete en los penaltis”, dijo el entrenador del Bournemouth, Andoni Iraola. “Pero él, junto con Ryan (Christie) y Tyler (Adams), hicieron un partido espectacular hoy contra jugadores que ganan muchos duelos”.
Cuando Kluivert no era el que recuperaba, siempre estaba en la mejor posición para ofrecer una opción de pase en la transición, como fue el caso en su segundo gol, cuando Ryan Christie ganó el balón en el centro del campo y Dango Ouattara encontró la carrera del atacante neerlandés.
El tercer gol de Kluivert también se originó cuando el Bournemouth recuperó la posesión en el campo de Newcastle, con Tyler Adams deteniendo la contra de los magpies interceptando el envío de Gordon para pasar a Justin, quien hacía el hat trick desde media distancia.
El primer tanto fue el reflejo de lo que vimos en varias ocasiones en Kluivert. El atacante sobrecarga la zona izquierda y crea un escenario de tres contra dos en la banda, con Livramento vigilando a Semenyo y Murphy entre el delantero y Kerkez.
Christie pasa a Semenyo y esto obliga a Livramento a subir. Kerkez avanza por la banda y Kluivert se lanza hacia el interior para poner a Murphy en una situación en la que tiene que dejar libre a uno de ellos. Christie encuentra la carrera de Semenyo detrás de la zaga y Murphy reacciona tarde, lo que permitió a Kluivert atacar el espacio libre entre líneas para el 0-1.
Pero lo más interesante de la actuación de Kluivert fue su forma de desplazarse hacia las bandas cuando el Bournemouth tenía la posesión. Justin se alejaba constantemente del centro para sobrecargar las bandas, como se puede ver en su mapa de toques.
Los movimientos de Justin Kluivert sacaron de posición a los defensores del Newcastle; y sus combinaciones de pases con el frente de ataque ayudaron a que el Bournemouth fuera una gran amenaza en las zonas amplias.
Kluivert fue la figura del partido justo en el mismo estadio donde jugó su padre Patrick. En el que seguramente sea el mejor momento de su carrera, Justin es uno de los motores de este gran Bournemouth.
