ميت مرحبا! شو الأخبار؟ (Mit marhaba! Sho al-akhbar?) Así se saluda en Siria, nuestra última parada en el Levante. Espero que estés muy bien hoy. La vez pasada estuvimos hablando de Hezbollah y los nexos que tiene con el más reciente campeón de Líbano, al-Ahed. Ahora nos movemos hacia el norte, hacia Siria, un país que ha tenido su historia en el futbol. ¡Allá nos vamos!
Recomendación musical 1
Siria tiene una historia que data de milenios. Han pasado muchas civilizaciones y religiones. Siria por ejemplo es tierra fértil para el sufismo, enfocado en la filosofía, en la relación con Dios. Es más, es la corriente del islam que ha generado mucha fascinación de Occidente. Esta es un ejemplo de la música sufí, que invita a la reflexión. La banda Nawa (فرقة نوا) canta Mowashah dhabya wadi al-naqah (موشح ظبي وادي النقا)
En esta ocasión escribo con Dani Deudermont, la persona que está al frente de la web Futbol desde Asia. Un apasionado del futbol asiático y una buena fuente sobre la que conocer la actualidad e historia de este deporte en este continente. Puedes seguirlo en Twitter como @DaniDeuder. ¡Bienvenido, Dani!
Vamos al tema de hoy.
Siria, buscando renacer después del terror
Después de la tormenta, viene la calma… al menos es lo que intentan hacer en Siria. Tras una guerra civil cuyas consecuencias todavía están a la vista, se levantan como pueden. Se intentó remover como fuera a Bashar al-Asad (بشار الأسد), pero no se pudo y ya vamos para el año 12 sin tener un fin claro a este conflicto.
La gente busca vivir como puede. Desde Siria han salido casi siete millones, en uno de los desplazamientos humanos masivos en los años recientes. Buscan sobre todo quedarse en Turquía, Jordania y Líbano, países que ya no se dan abasto con tanto refugiado. Los que se quedan (14 millones) se encuentran con condiciones de vida bastante rudas. Al terror de vida se le suman cuestiones como las sanciones de Estados Unidos, la crisis económica en Líbano y la hiperinflación de la libra siria, entre otros factores. Por si fuera poco, Siria es el país del Medio Oriente más golpeado por la pandemia por Covid-19.
La gente espera una señal para regresar a la vida como era antes de ese año 2011. Siria era un país de pobres y ricos. En su momento era un país donde cristianos, drusos y musulmanes podían hacerse amigos en cuestión de minutos. La capital Damasco tenía un costo de vida muy barato, la comida era deliciosa. Sí, tal vez había pobreza, sobre todo al este del país, pero la vida en Siria era bastante tranquila y muy similar a lo que vemos ahora en Turquía.
Siria no es un país que regularmente se haga notar en el contexto futbolístico, pero sería un error pensar que su historia en este deporte no existe. Así como en el encuentro de civilizaciones, el futbol se ha asentado en Siria desde hace mucho tiempo y con gran éxito además. Es momento de ver el futbol en este país.
Breve historia de Siria
Si algo puede definir a Siria es una antigüedad sin límites. En serio, se dice que Damasco es la capital más antigua sobre la faz de la tierra. Resumir esta extensa historia es no hacer justicia a su legado, pero no hay de otra.
Recientemente se han encontrado restos humanos que datan de 800 mil años atrás. Estar en el llamado Creciente Fértil nos dice que aquí se asentaron tribus que buscaban condiciones de vida favorables. Curiosamente la civilización más antigua es la llamada Ebla, un gran imperio semita que llegó a tener 280 mil habitantes. Floreció con el comercio con Sumeria y con Akkad. Ésta última los conquistó finalmente, y a su vez pasó a ser territorio de los hititas.
Tras otro paso entre cananeos y fenicios, los arameos ganaron la mano dominante y establecieron un reino en el Levante que pronto rivalizaría con los hebreos. De nada sirvió porque se vino una seguidilla de dominios: que los asirios, que los egipcios, que los babilonios, que los hititas, que los persas, que los griegos, que los armenios, que los romanos… todos veían con codicia este estratégico territorio para dominar toda esta fracción de Tierra.
Los romanos dejaron una impronta que hasta la fecha se puede apreciar. Siria jugó un rol determinante en la historia del cristianismo. En esta provincia romana estaba la ciudad de Antioquía (hoy en una penetración de Turquía). Por aquí se pasaron seis siglos (con partición de imperio incluída), hasta que cayó a manos de los árabes. Con incursiones de francos por un lado (las Cruzadas) y las hordas mongolas por el otro, Siria poco a poco fue perdiendo relevancia hasta que una nueva ruta comercial le quitó el protagonismo que alguna vez tuvo.
Es así que se transformó en una mera provincia del Imperio Otomano, pero en religión era otro cantar. Se decía que por Damasco los peregrinos recibían una bendición especial para proseguir su camino para La Meca. De todos modos, los otomanos mantuvieron la coexistencia pacífica entre diversas etnias y religiones (chiíes, suníes, maronitas, judíos, ortodoxos y armenios)
La Primera Guerra Mundial cambiaría todo el escenario geopolítico de la zona y Siria no escaparía a estos cambios. El final de la primera Gran Guerra expulsaría a los otomanos de Oriente Próximo y Siria, junto a Líbano, pasaron a estar bajo la influencia de Francia abandonando Inglaterra sus pretensiones sobre Siria. Todo esto se dio en secreto con un tratado hecho entre diplomáticos francés y británico, el llamado Sykes-Picot (ya lo mencionamos en su momento).
Con este dominio francés, hubo convulsiones en su demografía. Limpiezas étnicas dirigidas a erradicar a cristianos, kurdos, asirios, causaban estragos. Francia no mantendría su influencia sobre Siria demasiado tiempo. Con la II Guerra Mundial, el poderío francés fue amainando hasta la independencia final en 1946.
Siria tras la independencia: los al-Asad en el poder
Tan pronto como Siria obtuvo la independencia, comenzó una etapa de inestabilidad y revoluciones. Imagina que durante los primeros diez años de vida hubo 20 gabinetes y redactó cuatro constituciones separadas. La crisis del canal de Suez conllevó al acercamiento de Siria con la Unión Soviética, movimiento que preocupó a Turquía y claramente a Estados Unidos.
En el auge del panarabismo, Siria y Egipto vieron que tenían políticas similares y se produjo la fusión de la República Árabe Unida, la cual duró apenas tres años por el centralismo en lo egipcio. Por estas fechas un partido socialista, Ba’ath (البعث), fue quien se quedó en el poder. A grandes rasgos hubo un golpe dentro del partido para purgar todos los defectos de este poder socialista. Lo que dio al traste fue la desastrosa guerra de los seis días contra Israel en la que perdieron los Altos del Golán, y un desacuerdo en el Septiembre Negro en Jordania en la que facciones del mismo partido no se pusieron de acuerdo.
Todo se fue alineando para que llegara un militar a la presidencia de Siria llamado Hafez al-Asad. Transformó al gobierno en un sistema monopartidista y se reeligió a base de referéndums (¡uno de ellos alcanzó 99% de aceptación con 99% de participación de todo el padrón electoral!). Reprimió con mano de hierro a la oposición, y también sofocó a los intentos de golpe de estado de parte de su hermano Rifaat. Con Hafez al-Asad (حافظ الأسد), Siria se volvió un actor clave en la política regional. Con un pragmatismo brutal, lo mismo podía ayudar a un país y luego a su enemigo. Fue el antisemita más férreo de toda la Liga Árabe, pero jamás logró recuperar el Golán.
Todo estaba hecho para que su segundo hijo Basel (باسل) heredara el poder y de hecho Hafez lo educó para ser su sucesor, pero tuvo un accidente mortal en 1994 y tuvo que cederlo a Bashar, que estudiaba tranquilamente oftalmología en Londres. En 2000 sucedió lo inevitable: Hafez murió a los 69 años. Para que no hubiera vacío en el poder, se modificó en la constitución la edad mínima para ser presidente (de 40 a 34 años) para que Bashar subiera al poder. Se esperaba que hubiera una mayor apertura en democracia, cosa que no sucedió. Siguió con la línea de su padre, aunque con visiones menos obtusas, en cierta manera obligado por las circunstancias (retiro de Líbano a raíz del asesinato de Rafic Hariri (رفیق حریري)). En lo interno, parecía que todo mejoraba en economía, educación, acceso a internet y turismo.
Historia del futbol en Siria
Mientras Siria buscaba la independencia, ya se respiraba el futbol en gran parte del país. La chispa que prendió en Líbano se extendió pronto acá. Prueba de ello es la creación de al-Karamah (الكرامة) en 1927, en la ciudad de Homs. Se podría considerar este club como uno de los precursores del futbol asiático fuera de India (ya lo vimos en su momento). Posteriormente en 1936, Siria se afiliaría a la FIFA para jugar únicamente amistosos con Líbano e Irak.
Líbano se transformó en uno de los primeros países del Medio Oriente en disputar las eliminatorias para el campeonato FIFA. El primer proceso en el que estuvo involucrado fue Brasil 1950. Por estar cerca de Europa, se le asignó la zona del viejo continente y para esta ocasión se tuvo que enfrentar a los turcos. En realidad no fue de gran resistencia, y los eliminó con un sonoro 7-0. De todas maneras, de nada sirvió, porque se tuvieron que retirar alegando dificultades económicas (aquí lo puedes leer más a detalle). Por esas fechas, les tocó encajar las peores derrotas de su historia: contra Grecia y contra Egipto, ambas con marcador de 8-0.
En realidad el futbol sirio en los años 60 y 70 no tuvo mucho que relatar, más que escuetas medallas en los juegos panárabes de Alejandría 1953 (plata) y Damasco 1975 (bronce). Para las eliminatorias de Inglaterra 1966 Siria e Israel fueron los únicos equipos asiáticos en jugar en Europa. Los sirios se tenían que eliminar en un grupo con España e Irlanda, pero se solidarizaron en el boicot de africanos y asiáticos por la pequeña cantidad de boletos disponibles para ambos continentes: ¡apenas uno para los dos continentes! (En su momento hablé de esto). En 1967 comenzó a disputarse la liga siria
El primer torneo para el cual Siria clasificó fueron los Juegos Olímpicos de Moscú 1980. Hay que hacer aquí una aclaración: no llegó por méritos propios. De hecho, de su grupo fue apenas el tercer lugar detrás de Irak y Kuwait. Pero sucedió el boicot de Estados Unidos. Irán también tenía cosas más importantes en qué pensar, como problemas por la Revolución Islámica (más información aquí). Por ello, los iraníes se retiraron y le dieron el pase a Siria. Ya con esa clasificación de rebote, pudieron alcanzar al menos un empate contra España a cero tantos. Los otros resultados fueron derrotas de 3-0 ante Argelia y 5-0 ante Alemania Oriental.
Siria estuvo a punto de meterse al mundial de México 1986. Primero que nada sacó de la carrera a Kuwait, que había clasificado a España 1982. Lo logró sacando un valioso empate de Kuwait para rematar la faena con una victoria por la mínima en casa. Luego eliminó a Bahréin, pero en la serie decisiva no pudo vencer a Irak y con un 3-1 en Bagdad dijo adiós a la vez en que ha estado más cerca de pasar al mundial.
Más allá de resultados que no despertaban mayor interés fuera de Asia Occidental, bien vale la pena asomarnos a la selección sub-19. Primero, lograron llegar a la final del campeonato asiático de la categoría en Qatar para así ganar el boleto a Arabia Saudita 1989. En ese grupo tuvieron una potencia indiscutible como la Unión Soviética, que los venció 3-1. Luego volvieron a caer contra Colombia 2-0. Sin embargo, en el último partido sacaron la casta para ir venciendo a los costarricenses 3-1 al acabar el primer tiempo. Desgraciadamente no pudieron dar más. Se quedaron cortos, y bastó con que Colombia solamente resistiera el 3-1 para pasar ellos por diferencia de goles.
Siria repitió para Portugal 1991, pero de nuevo ocurrió esa clasificación de rebote. Sucedió que hubo final coreana en el Asiático sub-19 y solamente había lugar para ellos. La cosa fue que en un esfuerzo diplomático sin precedentes, ambas Coreas se quisieron unir para competir juntas en un equipo, iniciativa más que aplaudida por la FIFA (aquí puedes leer más información). Entonces, el boleto restante fue a parar a Siria, que se había quedado con el bronce al ganar a Qatar 1-0. Comenzaron bien su participación al vencer a Uruguay en su debut por la mínima. Luego sorprendieron a Inglaterra jugando bien y ya para el minuto 65’ ganaban 3-1. Desgraciadamente se dejaron empatar, pero eso les dejaba a las puertas de su clasificación, que certificaron resistiendo el empate sin goles. Llevaron hasta el límite a los australianos en cuartos (1-1) y solamente los penales los privaron de medirse a los anfitriones en semifinales.
Década de 2000: gran época para el fútbol sirio
Hoy en día la Federación Siria es una de esas naciones cuyo ranking asiático (27) la tiene a caballo entre la Champions League y la AFC Cup. En Asia los dos torneos de clubes están divididos en función del ranking participando en la Champions los mejores países asiáticos y quedando el resto en la AFC Cup. Para los clubes sirios, que alternan participaciones en ambos torneos, es una utopía soñar con ganar el principal torneo asiático a nivel de clubes. Ni la infraestructura, ni el nivel deportivo ni el económico les permiten competir con los grandes clubes saudíes, cataríes ni con las grandes potencias del Lejano Oriente.
La historia era bien diferente en la primera década del siglo XXI. al-Jaish (الجيش) y al-Karamah dominaban la Premier League siria en estos años logrando cuatro títulos cada uno. Los otros cayeron en manos de al-Wahda (الوحدة) y al-Ittihad (الاتحاد) siendo segundo, en ambas temporadas, al-Karamah. Precisamente al-Karamah rozó el título de la AFC Champions League en 2006. Alcanzó la final donde caería por un global de 3-2 ante los surcoreanos de Jeonbuk Hyundai Motors (전북 현대 모터스). Esa Champions del 2006 fue el momento en que más cerca estuvo el fútbol sirio de coronarse campeón del máximo torneo continental. al-Karamah cumpliría las dos temporadas siguientes aunque cayendo en cuartos de final. Nunca más volvió ningún club sirio a alcanzar esas rondas.
Donde si llegarían los títulos fue en la AFC Cup. Un torneo que se creó en 2004 y cuya primera edición fue un monólogo sirio. La final, a doble vuelta también, la jugarían al-Jaish y al-Wahda con triunfo de los primeros en lo que fue una auténtica fiesta para un fútbol que peleaba con las dificultades propias del país. El segundo título en esta competición llegaría en 2010. Una edición que midió en la final a al-Ittihad contra al-Qadsia (القادسية), uno de los grandes del fútbol kuwaití. Los penalties darían el título a al-Ittihad y el segundo al fútbol sirio.
Por si los éxitos de los clubes no fueran suficientes, las selecciones inferiores se unían a la fiesta. La sub-20 jugaría el Mundial del año 2005 en Países Bajos, alcanzando los octavos de final. En fase de grupos firmó tablas con Canadá y ganaría a Italia perdiendo tan solo ante una Colombia en la que anotaban los goles dos viejos conocidos del fútbol internacional como Héctor Rodallega y Radamel Falcao. En octavos Brasil dejaría fuera a los sirios por un ajustado 1-0 marcado por el que sería jugador del Bayer Munich Rafinha.
También la categoría sub-17 vería a Siria en un Mundial. Fue la edición 2007 disputada en Corea del Sur y, también aquí, se alcanzarían los octavos de final. Empate ante Argentina, derrota contra España y victoria sobre Honduras en el partido definitivo para llegar a octavos y caer por 1-3 ante Inglaterra.
Resultados agridulces antes de la guerra
Siria afrontó el proceso hacia Sudáfrica 2010 con ciertas ilusiones. Primero sacó a Afganistán sin tanta ciencia y en la segunda ronda masacró a Indonesia. En la tercera ronda se tuvieron que enfrentar en el grupo 5 a Irán, Emiratos Árabes Unidos y Kuwait. Era un grupo muy complicado y estuvieron en el bombo de los débiles. Empezaron bien al sacar empates de Teherán y ganarles a Kuwait en casa. Todo se complicó con dos derrotas que obligaron a vencer a Emiratos Árabes Unidos por diferencia de tres goles de visitante. Iban bien hasta el minuto ‘80; ganaban 0-2. Por desgracia concedieron penal y el 3-1 fue insuficiente para que pudieran proseguir.
Tuvieron su premio de consolación con una eliminatoria magistral para la Copa Asiática Qatar 2011. Era justo y necesario después de tres ediciones sin poder meterse, y ahora lo hacían como líderes de grupo. Ya en la competencia como tal les tocó un grupo bastante complejo con Japón, Jordania y el subcampeón Arabia Saudita. Primero les tocó con los saudiárabes y nadie habría imaginado que pegarían primero con un 2-1. La derrota contra los japoneses (1-2) estaba presupuestada y todo se reduciría a un duelo de matar o morir frente a Jordania.
Justo en este partido comenzó la reputación de Siria como equipo que deja escapar todo de manera dramática. Ganaba al minuto ‘19, pero un autogol de su mejor jugador Ali Diab (علي دياب) abrió el camino para que Jordania certificara su pase dándole la vuelta al partido y sufrieran una eliminación increíble.
Lo que pocos imaginaban es que ese partido sería la última pieza de alegría en mucho tiempo si es que a eso se le llama alegría. Casi una semana después se reunirían cientos de estudiantes contagiados por las olas de la primavera árabe. Protestaban por una mayor apertura democrática y exigían la salida de Bashar al-Asad. Fueron reprimidos y así comenzaba la Guerra Civil.
Fuentes
BBC News. Why has the Syrian war lasted 11 years? 15 de marzo de 2022
CIDOB. Bashar al-Assad
Rincón, Andrea. Bashar al-Assad cumple 20 años en el poder a la sombra de una Siria en ruinas. France 24. 17 de julio de 2020
Ramponi, Alessia. Siria: un viaje a la cuna de la civilización. Purgante. 31 de julio de 2022
Hasta el momento no se sabe cuándo acabará la Guerra Civil. Son 12 años de conflicto en el que han intervenido muchos actores, desde potencias mundiales hasta el temido Estado Islámico o Daesh. Por seguridad no pueden jugar en Damasco. Con todo eso en contra y con un país en ruinas, casi logran la hombrada de clasificar al mundial de Rusia 2018. La historia de esa campaña heroica se leerá en nuestra siguiente parada.
Recomendación musical 2
La música pop jamás ha abandonado a Siria, mucho menos antes de que se desatara el infierno. Puedes apreciar videos musicales muy parecidos a los que pululan en la escena turca. Es Hos (هس) de Kamel Yosef (كامل يوسف).
Recapitulemos
Siria es un país milenario que ha visto pasar a diversos imperios que cambiaron la historia, como los babilonios, los persas, los griegos, los romanos, los árabes y los otomanos. Después de la I Guerra Mundial, Siria quedó bajo dominio francés debido al tratado Sykes-Picot. Obtuvo la independencia en 1946. Tras años de inestabilidad y derrotas dolorosas, Hafez al-Asad se quedó con el poder por 30 años. Lo heredó a su hijo Bashar de manera fortuita.
El futbol ha estado también presente desde antes de la independencia, con la fundación de al-Karamah. Siria fue de los primeros países del Medio Oriente en participar en unas eliminatorias al mundial (Brasil 1950). Los resultados no los acompañaron sino hasta el proceso clasificatorio a México 1986, en el que perdió con Irak la serie decisiva. La década de los 2000 podría considerarse halagüeña para el futbol sirio, al ganar dos veces la Copa AFC (al-Jaish en 2004 y al-Ittihad Aleppo en 2010), llegar a la final de la Champions League (al-Karamah en 2006), clasificar a octavos de final en el mundial sub-20 Países Bajos 2005 y también a octavos de final, pero de la sub-17 (Corea del Sur 2007). La última gran competencia antes de la Guerra Civil fue la Copa Asiática Qatar 2011, en el que quedó fuera de manera frustrante en el último partido de la fase de grupos.
Nos vemos la siguiente. Bshofak ba’dan! (بشوفك بعدان!)
