El fútbol mexicano está de enhorabuena. Después de cumplimentar unos Juegos Olímpicos de ensueño, consiguiendo la medalla de bronce y demostrando la materia prima de la que disponía Jimmy Lozano -y dispone el Tata Martino a corto-mediano plazo-, muchos de los integrantes de una hornada para el recuerdo parecen vivir sus últimos bailes en la caótica Liga MX. En esta ocasión, Johan Vásquez, ex-futbolista de Pumas, desembarca en la Serie A con el Mundial de Catar 2022 en la retina, consciente de la importancia de foguearse en ligas de mayor exigencia para, de esta forma, alcanzar un nivel superior que le permita consolidarse en la absoluta. El Génoa será el equipo encargado de continuar la formación de un jugador llamado a ser presente y futuro, con todas las responsabilidades que ello lleva implícitas.
En Tokyo 2020, Johan Vásquez fue uno de los nombres propios del torneo. En la fase de grupos, el nuevo rostro del Génoa demostró madurez, solvencia defensiva y tablas, consiguiendo minimizar los recursos de Francia U23; en concreto, de André-Pierre Gignac, viejo conocido de la Liga MX. Frente a Corea del Sur, su pierna izquierda se erigió como una máquina incansable a la hora de proyectar a sus compañeros, sobre todo, a los atacantes: desplazamientos en largo para saltar líneas de presión, envíos milimétricos para nutrir a Córdova y a Romo (interiores) en sus llegadas al área y simplificar las subidas de los laterales con pases precisos. Posteriormente, tuvo que sumar nuevos registros y ofreció una masterclass en anticipación, lectura de juego y velocidad -también cuerpeo- ante Richarlison (Brasil U23); lo que, a su vez, supuso salir momentáneamente de su zona de confort. Aseado y educado con balón, le tocó bailar con la más fea, como quien dice, doctorándose en contextos poco usuales para él.
En su nueva aventura lejos de la Liga MX, y enrolándose en la siempre exigente Serie A, Johan Vásquez se encontrará a un equipo consistente que, además, apuesta por un sistema de tres centrales (+2 carrileros). Sobre el papel, no parte como titular, aunque se espera que comience sumando minutos de manera gradual y progresiva, adaptándose a una competición totalmente diferente y mucho más complicada. En la misma línea, el ex-jugador de Pumas deberá aplicarse al máximo y adquirir conceptos defensivos que le harán salir de su zona de confort con más asiduidad: defensa de área, lectura de juego, solvencia defensiva y, sobre todo, concentración los 90 minutos. Además, se espera que compita por un puesto de titular con zagueros experimentados como Domenico Criscito (34) o Davide Biraschi (27). Pese a ser competencia directa, ambos dinamizarán el periodo de adaptación de uno de los defensas centrales mexicanos con mayor proyección en el panorama actual.
¿Qué puede aportar Johan Vásquez a la Serie A y al Génoa?
A sus 22 años, el defensa nacido en Navojoa se encuentra inmerso en una etapa de aprendizaje constante. Lejos de conformarse con unas cualidades dominantes que le han permitido despertar el interés de clubes de renombre europeo, Johan Vásquez ejemplifica el símil de la esponja: absorbe todo tipo de conocimientos y, por encima del resto de cosas, muestra predisposición siempre. De igual manera, su ambición será clave en una liga como la italiana. Deberá doctorarse y demostrarlo cada vez que tenga la oportunidad. Además, sus desplazamientos en largo, en teoría, serán una baza importante para el Génoa.
De nuevo, el equipo de Liguria, sobre el papel, se posicionará en un bloque medio-bajo que priorice no encajar gol. Consecuentemente, la defensa de área será en concepto defensivo a desarrollar durante el transcurso del encuentro. Asimismo, se esperan contragolpes como vía principal -e inicial- para penalizar errores del rival. Por consiguiente, el rol de Johan Vásquez, en este tipo de acciones, puede llegar a ser clave: sus desplazamientos en largo y su capacidad para saltar líneas a través de los mismos suponen una alternativa recurrente que deberá explotar Davide Ballardini, técnico del Génoa.
Pese a no disponer de un físico imponente, durante los JJOO y a lo largo de su periplo en Pumas demostró una lectura de juego notable que le permitía, constantemente, adelantarse a los movimientos del atacante rival. Este tipo de atributos, en competiciones tan exigentes como la Serie A, serán diferenciales a la hora de abordar aspectos como la anticipación o la optimización de recursos defensivos. Además, Johan Vásquez ha demostrado saber cómo frenar y secar a delanteros superiores en términos de altura, peso y envergadura.
¿Qué puede aportarle la Serie A a Johan Vásquez?
La liga italiana cuenta en sus filas con defensas experimentados como Bonucci o Chiellini; ambos, habiendo demostrado a lo largo de los últimos años que, pese a que el físico, poco a poco, se vaya perdiendo, la inteligencia táctica es fundamental en la Serie A. En la misma línea, también se ha convertido en un escaparate interesante a la hora de descubrir a jóvenes talentos como Bastoni o Andrea Cistana. Con el Mundial de Catar 2022 en el horizonte, la Serie A supondrá un aprendizaje continuado para Johan Vásquez, que podrá consolidar sus cualidades (desplazamiento en largo, velocidad al corte, lectura de juego), sumar nuevas (defensa de área, posicionamiento, cuerpeo) y aprender de los mejores. En la misma línea, esta aventura convertirá al ex-futbolista de Pumas en un defensa curtido en batallas exigentes, con contextos, a priori, poco favorables y teniendo que realizar ejercicios de supervivencia en bloques medios-bajos. Aunque hay que decir que es un zaguero sólido defendiendo su área. Ahora, le toca aprender y madurar en una de las mejores ligas del mundo.
De la generación que consiguió la medalla de bronce en los JJOO de Tokyo 2020, se espera que Johan Vásquez no sea el único que desembarque en el fútbol europeo. Tras el que fuera jugador de Cimarrones, Sebastián Córdova, Alexis Vega o Luis Romo deberán enfundarse el mono de trabajo, salir de su zona de confort (Liga MX) y probar nuevas aventuras que les permitan continuar desarrollándose al máximo nivel. Cuanto antes, mejor para todas las partes implicadas. En segunda línea, y sin tanto mercado, efectivos como Charly Rodríguez, César Montes y Loroña esperarán su oportunidad, conscientes de la importancia de seleccionar el momento idóneo para partir.