Ucrania 0-1 Austria: Cuestión de timing

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Pese a que ambas llegaban a esta última jornada con una victoria y una derrota, las sensaciones eran bastante diferentes. La Ucrania de Andriy Shevchenko ilusionaba, con su ejército de centrocampistas y el fantástico torneo de Roman Yaremchuk como principales armas, mientras que la Austria de Franco Foda transmitía todas las dudas posibles. Su estrella, David Alaba, no parecía encontrarse cómodo, el sistema no funcionaba y se carecía de posesiones fluidas. Nada más lejos de la realidad, los segundos completaron su mejor partido en el torneo, motivado por el cambio de esquema, mientras Ucrania decepcionó y queda al borde de la eliminación, dependiendo de otros grupos.

De la línea de cinco defensores usada en los primeros partidos, Foda pasó a una línea de 4 con Alaba como lateral izquierdo, dejando de ser el jugador más atrasado del equipo como estaba siendo en esta Eurocopa. Con el nuevo jugador del Real Madrid ahí, la selección austriaca ganó mucha más presencia y fluidez en campo rival, relacionándose con Sabitzer y Baumgartner. Además, la presencia de Florian Grillitsch como mediocentro y su sencillez para jugar con balón y permitir avanzar, quitando a Schlager esas labores de gestión que no le estaban sentando bien, añadió una capa más a la selección austriaca. Por último, la presencia de Marko Arnautovic como 9, muy libre descendiendo en apoyo, ayudó a limpiar las posesiones y ofrecer ventajas a sus compañeros.

Ucrania repitió la fórmula que le funcionó ante Macedonia del Norte, utilizando por izquierda a Shaparenko lateralizado, un lateral profundo como Mykolenko y Malinovsky en zonas intermedias, misma ocupación que Zinchenko en derecha. El mal partido del delantero Yaremchuk, fundamental en los dos partidos anteriores, quitó fluidez y capacidad de salida a una Ucrania que atacó menos y peor, repercutiendo esto en su fase defensiva.

Apuntábamos el día del primer partido ante Países Bajos que la de Shevchenko no es una selección que se sienta cómoda defendiendo en campo propio, no siente el fútbol así. Austria consiguió encerrarles durante tramos largos de partido y se les vieron las costuras, con el central Illia Zabarnyi y el lateral Mykolenko quedando especialmente señalados, el primero por no imponerse en los duelos y el segundo por los problemas cubriendo su espalda.

Arriesgó Shevchenko prescindiendo de Malinovsky en el descanso, que aunque es cierto que no estuvo bien durante la primera mitad, es uno de las individualidades más potentes del país y que más te acerca al gol. No le salió bien la apuesta al seleccionador, pues aunque Ucrania atacó mucho más, encerrando al rival en su campo por momentos, faltó fluidez y capacidad de amenaza, dependiendo de un Zinchenko que pasó del interior derecho al izquierdo y acabó de lateral. Los de Foda resistieron con grandes versiones de Dragovic y Hinteregger en el área, y además siempre tuvieron la posibilidad de salir, ya fuese con Sabitzer lanzando transiciones o con Arnautovic participando en apoyo y dejando compañeros de cara.

Austria se clasifica como segunda de grupo y tendrá el titánico reto de medirse a Italia en octavos, aunque con esta nueva versión del equipo y el reajuste en la posición de Alaba, tienen motivos para ilusionarse. A Ucrania, en cambio, le llegó el peor partido en el peor momento posible y ahora dependen de los otros grupos para clasificarse.

Hugo Marugan
Hugo Marugan
Fútbol. Para disfrutarlo, para aprender y para contarlo.

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