HISTORIAL:
¿CÓMO CLASIFICÓ?
ANÁLISIS:
Ocho años después de meterse en la primera Eurocopa de su historia, un proceso maravillosamente narrado en el libro Crónicas Balcánicas de Axel Torres, Albania vuelve a la gran competición europea de selecciones con muchas caras nuevas, el único entrenador no europeo del torneo (el brasileño Sylvinho) y la sensación de que, a falta de estrellas que se alcen por encima del colectivo, el sistema protege carencias y potencia facultades.
Un país tan pequeño, herido todavía por la guerra de los Balcanes, está logrando pasos agigantados en su fútbol que, si bien todavía no se reflejan en los clubes, sí lo hace en la selección, donde han conseguido minimizar el impacto del final de la era de Gianni De Biasi, el entrenador que les hizo aparecer en el foco mediático con su participación en Francia 2016, resucitando a un equipo que, de la mano de Sylvinho, y con apariciones interesantes como Kristjan Asllani o Armando Broja, dos jugadores que se han ganado un puesto en algunas de las mejores plantillas del continente, si algo garantiza es competir.
Sin embargo, a pesar de los avances, Albania sigue siendo una selección que suele adoptar planes de mínimos y de presunta inferioridad en sus partidos, algo que, en principio, se acentuará en una Eurocopa donde han caído en un grupo muy complicado con España, Italia y Croacia. A partir de su habitual 4-2-3-1, que en ocasiones puede mutar a 4-3-3 si Bajrami se hunde unos metros, optan de manera normal por salidas directas, buscando a un Broja que cae sobre el sector derecho, y que están bien compensadas con los movimientos profundos del propio Bajrami y del veloz Jasir Asani para atacar la prolongación.
Son, por lo tanto, muy verticales y rápidos en sus jugadas de ataque, no es un equipo al que le guste amasar la posesión. Pueden buscar mecanismos en salida como hundir mucho a los laterales, atrayendo la presión rival, para generar espacios para Asani en campo rival. En fases de construcción media se puede observar tanto que uno de los dos miembros del doble pivote, ya sea Ramadani o Asllani, bajen al doble pivote para tener superioridad, con el lateral izquierdo Mario Mitaj dando mucha profundidad, o formar en paralelo en la base de la jugada, con el equipo buscando por delante a un Nedim Bajrami que se mueve muy bien para generar líneas de pase en zonas intermedias.
De todos modos, si algo predomina en la fase con balón del equipo albanés son sus constantes balones largos sobre la última línea rival, donde entre la corpulencia de Broja para imponerse en esas situaciones, la velocidad de Asani y la inteligencia de Bajrami para imponerse en caídas, se instalan en los últimos metros del campo. También son un equipo peligroso en transición, desplegándose bien especialmente a partir de lo que les facilita Ylber Ramadani, un jugador que tiene papeletas para ser una de las revelaciones del torneo (pese a que cuenta ya con 28 años) gracias a su excelente manejo del balón ante presión, retención ante acoso y pase rápido que conecta por delante y permite al equipo salir rápido a la contra, con Asani desplegándose como un rayo.
También cabe mencionar que Sylvinho es un técnico bastante intervencionista y que suele tener buena lectura, manejando alternativas en el banquillo como Rey Manaj, que podría ganarse un sitio como titular, o Mirlind Daku que es un gran delantero de área por si necesitan empujar en minutos finales de los partidos.
Su fase sin balón es la más trabajada y en la que pasan mayor minutaje, siendo un equipo bastante defensivo y rocoso, que suele esperar en bloque medio o medio-bajo dentro de un 4-4-2 en el que Bajrami sube a primera línea junto a Broja (está la alternativa del 4-3-3 con Bajrami interior). Son un equipo muy comprimido por dentro, buscando negar pases en esa zona, donde cuentan con vencedores de duelos (especialmente Djimsiti saliendo de zona y buscando anticipar, la herencia de Gasperini en Bérgamo) y orientar hacia fuera, incitando al rival a que acabe colgando balones al área donde se protegen relativamente bien, con dos centrales poderosos y contundentes como son el propio Djimsiti y Ardian Ismajli. Pueden sufrir, eso sí, los laterales cerrando el segundo palo.
Pese a que en partidos recientes han buscado una alternativa en su plan de partido, con los extremos muy comprimidos dentro, los laterales saltando hacia fuera y los centrocampistas siguiendo rupturas rivales en carril central, si algo ha caracterizado el ciclo de Sylvinho en Albania ha sido la búsqueda por que los extremos se hundan mucho en fase defensiva, por momentos a la altura de la última línea. Más común en derecha, con Asani bajando persiguiendo al lateral rival y Hysaj quedando como tercer central, pero también hay ocasiones en los que ambos extremos bajan de forma simultánea, dibujando por momentos un ultradefensivo 6-3-1 que busca desesperar al rival.
De Francia, hace ocho años, se despidieron con una victoria que ya es historia del fútbol albanés, pero, como nunca se sabe cuándo puede ser la última vez, querrán repetir un papel similar ahora en Alemania. El grupo no invita a ello, pero se reconocen en lo que hacen y creen en sus posibilidades.
XI TIPO:
FIGURA: BERAT DJIMSITI
A sus 31 años, y tras pasar la mayor parte de su carrera en la Atalanta, el pasado mayo, tanto él como el equipo, alcanzaron la gloria en Dublín conquistando la Europa League en lo que ya es el partido más importante de la historia del club. Habiendo desarrollado la mayor parte de su carrera bajo Gian Piero Gasperini, Djimsiti es, pues, un central que sale mucho de zona, que gusta de marcar al hombre, intentar anticipar y contundente en los duelos.
En el sistema de la selección de Albania está mucho más protegido, sale menos de zona y se queda protegiendo el área, donde también demuestra buenas facultades y capacidad para imponerse a los delanteros rivales. Quiere culminar la temporada de ensueño guiando a Albania a un buen papel.
PROMESA: KRISTJAN ASLLANI
Un ascenso meteórico con el Empoli le llevó a fichar por el Inter de Milán el pasado verano de 2022, cuando apenas contaba con 20 años. En el equipo campeón de Italia no está teniendo tanto protagonismo como le gustaría, algo opacado bajo la sombra de Hakan Çalhanoğlu, pero Inzaghi le da minutos de vez en cuando y él demuestra su valía.
Si en el Inter actúa como mediocentro, en la selección de Albania lo hace unos metros por delante, siendo el que más se despega del doble pivote para llegar arriba, aunque con presencia en la base de la jugada donde demuestra su buen pase filtrado y giro ante presión. Puede demostrar ahora el talento que en Milán se está escondiendo.
ENTRENADOR: SYLVINHO
Mítico lateral brasileño campeón de Europa con el Barcelona y con paso por el Arsenal y el Manchester City, es el único entrenador no europeo del torneo. Arrancó su carrera en los banquillos en Francia, dirigiendo al Olympique Lyon en una experiencia que no fue demasiado bien, antes de saltar a su país, en el Corinthians. En enero del año pasado se hizo cargo de la selección de Albania y les ha llevado a la segunda Eurocopa de su historia.
En el combinado balcánico muestra una postura algo más defensiva y conservadora que en experiencias propias, seguramente asumiendo que es la mejor manera de competir con lo que tiene. Ha creado un buen ecosistema para que sus jugadores muestren sus cualidades.
LISTA DE CONVOCADOS:
