Comparte esta historia:

Facebook
LinkedIn
Twitter
Pinterest
Email
WhatsApp

HISTORIAL

Infografía: Ricardo Calvente (Editorial Puskas)

CLASIFICÓ VÍA ELIMINATORIA

Infografía: Ricardo Calvente (Editorial Puskas)

¿CÓMO JUEGA?

El combinado polaco es un equipo que gusta de ceder la iniciativa por el perfil de sus fichas y el bloque defensivo que presenta. En un grupo que le acompañarán España, Eslovaquia y Suecia, se sentirá más cómodo sin el balón, pero habrá encuentros -o tramos de estos- donde deberá coger las riendas del juego y mandar sobre este. 

El muro defensivo de la selección se coloca en un bloque medio, alternando fases en las que sale a tres cuartos de campo a presionar. Se estructura en 1-3-5-2, realizando una de las presiones más típicas del Calcio italiano. Esta se basa en que los puntas empiezan de manera pasiva, esperando su estímulo para ser más agresivos (es decir, cuando el balón viaja a banda). En el momento que llega ese pase al hombre que ocupa la base del pasillo interior de un costado, mientras viaja la pelota, salta uno de los interiores de Polonia.

En ese escenario (interior polaco saltando a lateral bajo rival, interior lateralizado o central de ese costado), los de Paulo Sousa tienen bastante mecanizado cómo acosar en el sector de balón. El carrilero salta con el jugador más alto que ocupa la amplitud del triángulo y el central del lado fuerte va sobre el hombre que espera en la zona entre líneas (generalmente interior o extremo). Es aquí donde Krychowiak tiene una función clave y, a su vez, difícil de explicar.

Si el pivote defensivo rival ya está marcado por el delantero centro polaco del lado contrario (realiza lo que se llama diagonal compensatoria, movimiento en el que suelta a su central y va directo a por el pivote para evitar su recepción), el cinco polaco no salta con su homólogo para estar cerca del interior rival y barrer todos los malos controles que se den en un espacio cortísimo. La clave en este tipo de defensas es la capacidad que tenga Polonia de vivir 90 minutos en emparejamientos individuales. En el momento que su calidad defensiva decaiga (mala defensa de la pared, de la doblada, del uno contra uno o de cualquier tipo de situación que supere y desajuste esta presión), puede sufrir mucho. Si se entrena bien, puede serle carta ganadora ante equipos que buscan ser muy dominantes. 

Con balón, la selección de Sousa no tiene un amplio abanico de patrones y rutas, pues tan solo tiene dos o tres jugadas que le pueden dar rendimiento, pero que, sobre todo, se sustentan a partir de la individualidad de sus fichas. La movilidad de Lewandowski es clave, pues el equipo se pasa el encuentro tratando de sujetar a los rivales de cerca de la zona que pisa el astro para que el nueve pueda recibir, girar y generar juego desde cualquier altura o carril. Con Milik también ocurre algo parecido, aunque con mucha menos frecuencia. Cuando pierden la pelota, es algo irregular en su transición defensiva, sobre todo a la hora de gestionar alejados. Bednarek es mucho mejor que Helik y se nota mucho la diferencia cuando Polonia la pierde en el sector izquierdo que en el derecho, respectivamente.

XI TIPO

La duda está en Jakub Moder o Mateusz Klich en el interior diestro, pero Sousa viene apostando por el actual jugador del Brighton. Puede alternar con Bartosz Berszynski como carrilero o central, dependiendo del perfil de selección que enfrentará (más ofensiva, Helik como central, menos ofensiva, Bereszynski central y Jozwiak carrilero). 

FIGURA

ROBERT LEWANDOWSKI

La figura es Robert Lewandowski, uno de los mejores jugadores de la actualidad y llamado a liderar la selección polaca. Será clave que aparezca ante contextos totalmente distintos. Alejado del área rival, con poco contacto con la pelota y mucha demanda de trabajo defensivo, para darle aire a su equipo, ser el que reine los contragolpes de su equipo y obligando al equipo rival a tener que atacar con menos efectivos para no descuidar su espalda. Con balón, ser ‘10’ de la selección, bajando y generando desde una altura inferior y finalizando las jugadas. 

PROMESA

JAKUB MODER

El jugador que tiene todas las papeletas para ser la revelación de su selección es Jakub Moder. Sin ser aseado técnicamente, es un jugador con un físico providencial, un recorrido elevado y un poso en sus acciones poco digno de un jugador de 22 años que representa a su país. Su jerarquía y calma dentro del terreno de juego eleva el nivel del jugador del Brighton a otra esfera, siendo el prototipo de jugador que siempre gusta en estos torneos veraniegos. 

ENTRENADOR

PAULO SOUSA

El técnico del combinado polaco es Paulo Sousa. Es entrenador desde hace una década, después de su retiro como jugador. Tiene experiencia en los banquillos del Queens Park Rangers, Swansea, Leicester, Fiorentina, Bordeaux, entre otros, hasta llegar este enero de 2021 a la selección europea. Como jugador, llegó a disputar dos Eurocopas (1996 y 2000) y un Mundial (2002).

Miquel Villarroya
Miquel Villarroya
Estudiante de Periodismo en la UAB. Amante de la táctica y el análisis de fútbol.

También lee: