La pentacampeona y favorita no se llevará la Copa del Mundo de Qatar. Brasil, en eliminatoria directa contra la vigente subcampeona, quedó fuera después de una dramática tanda de penaltis donde Rodrygo primero y Marquinhos después erraron, siendo Croacia un combinado infalible en la tanda desde los once pasos. Brasil, allá donde no existen favoritas y donde las estrellas del pecho no intervienen de forma directa, queda eliminada de la Copa del Mundo después de la enésima exhibición defensiva croata. Neymar Jr, si así lo desea, tendrá que esperar a 2026.
De inicio, Tite repitió dibujo y estructura respecto al pasado encuentro ante Corea del Sur. Partiendo de un 4-2-3-1 que, con balón, pasaba a ser un 3-2-4-1, Danilo solía aparecer en posición de lateral-interior (cerca de Casemiro) mientras que Militao, como lateral derecho, no se proyectaba al frente para formar parte de la línea defensiva. Lo demás (y qué “demás”: Neymar, Paquetá, Vinícius, Richarlison y Raphinha), a fluir por arriba, cada uno partiendo de un carril para aparecer con libertad en tantos espacios desocupados quisieran. Por la parte croata, desde el 4-5-1 en bloque medio-bajo, empezaron a hacer daño a partir de los envíos largos diagonales a la espalda de los laterales rivales.
Mientras el juego se convirtió en un partido de salida contra presión (en ambos sentidos), no hubo un dominador claro. Incluso, Croacia tuvo alguna aproximación clara para ponerse por delante. No obstante, como viene siendo la tónica habitual del torneo, en cuanto Brasil lograba asentarse cómoda en campo contrario, el fútbol se convertía en danza y las relaciones de inmensa calidad empezaban a someter a su rival. No obstante, esto no se dio tanto en cantidad como sí en calidad. El férreo bloque croata se mantuvo estable en todo el tramo del primer tiempo, concediendo poco más que un par de ocasiones claras a su rival y mandando el marcador al descanso en tablas.
Arrancaría la segunda mitad con más ocasiones que durante toda la primera. Desde fuera hacia dentro, sobre todo en botas de Neymar, Brasil empezó a encontrar buenas sensaciones a la hora de pisar área, aunque encontrándose contra el que, sin duda, es el portero del torneo: Dominik Livakovic, con paradas de balonmano y una técnica excelente para repeler los disparos a puerta. Brasil se topó una y otra vez con un portero crecido durante la Copa del Mundo, y tuvo que sudar para encontrar su principal ventaja: la relación entre el gran talento que reúne en el frente de ataque. Mérito indiscutible del compacto bloque croata. No obstante, lejos de tornarse una segunda parte tan divertida como en sus primeros cinco minutos, el miedo se apoderó de los dos contendientes y el ritmo de circulación volvió a ser lento, sin muchas progresiones que derivaran en errores.
Croacia empezó a tener mucho balón, sumando rondos en fase de inicio pero sin generar ocasiones. Llegó, con esto, la prórroga. Una en la que el guion empezó a teñirse de amarillo, no tanto en ocasiones como sí en posesión de balón… Hasta que, por fin, entraría la pelota en el 105′ sobre la siempre segura portería de Livakovic. Sería nuevamente con una relación muy corta de Brasil en la frontal, con Neymar involucrado, tanto en las paredes cortitas (con Rodrygo y Paquetá) como a la hora de regatear al portero y definir. La favorita Brasil se veía, con esto, en las semifinales de la Copa del Mundo. Y lo estaba, con toda seguridad, de no ser por un contragolpe magníficamente lanzado por Luka Modric, conducido por Vlasic, asistido por Orsic y definido por Bruno Petkovic, con desvío incluido en Marquinhos, para el 1-1 a tres minutos del final.
Nunca antes había perdido una tanda de penaltis Croacia en una Copa del Mundo. Tres de tres. Tampoco Brasil la había perdido desde 1986 contra Francia. De la parte croata, con el permiso de Luka Modric, el gran protagonista de su combinado nacional, Dominik Livakovic; por la parte brasileña, uno de los mejores guardametas del mundo, Alisson. En sus guantes, unas semifinales de la Copa del Mundo. Empieza Croacia: gol de Vlasic. Responde Brasil: paró Livakovic a Rodrygo. Lovro Majer, Casemiro, Luka Modric, Pedro, Orsic. Todos dentro. La suerte, en este caso, como en todo el encuentro (no puede ser suerte si se repite tanto…), fue de parte croata nuevamente. Y falló Marquinhos. En el peor momento, después de un gran Mundial, Brasil eliminada por dos penaltis fallados. Así se fue la que, para muchos, era la gran favorita.
