La vigésima jornada de Premier League nos ha dejado partidos muy emocionantes, y uno de ellos ha sido el Derbi de Manchester. Dos enormes equipos se medían en el ‘Teatro de los Sueños’. Con ansia se esperaba este encuentro y no defraudó, como tampoco decepcionó el técnico neerlandés, Erik ten Hag.
El Manchester United ahora tiene un plan colectivo. Es un equipo coral en el que todos son importantes con su correspondiente función en el equipo. Con su estrategia, el neerlandés consiguió neutralizar con éxito rotundo al Manchester City de Pep Guardiola, sus vecinos, el perseguidor del Arsenal en la carrera por el título.
Los Red Devils se sintieron cómodos en dos situaciones distintas de partido. En la primera parte, imprimiendo más pausa con balón buscando siempre la mejor solución y en la segunda, lanzando transiciones ofensivas largas a la espalda del rival atacando el espacio. ten Hag demostró ser flexible con su idea teniendo un plan B para contraponer al oponente.
El Manchester United realizó un marcaje al hombre para defender a los sky blues. Ten Hag situó una defensa posicional con Casemiro pendiente de Bernardo Silva, Eriksen atento a Rodri y Fred sobre De Bruyne. La destrucción se ganó en el centro del campo, con los ya nombrados para la misión y Bruno Fernandes liberado para las contras con Rashford.
Es raro decir que no hubo noticias de Erling Haaland, pero así fue. La persecución de Varane con las ayudas de Wan-Bissaka hicieron que Foden y el ariete no crearan peligro. En el otro costado, Tyrell Malacia contuvo a Mahrez con nota y Shaw realizó un gran encuentro.
En el medio, un intenso Fred hizo una labor fantástica y Casemiro, una vez más, estuvo impecable ofreciendo siempre la mejor solución. Eriksen ayudó de buena manera hasta que se diluyó y tuvo que ser cambiado.
El ataque apretó, en especial cuando fueron sustituidos Martial y Eriksen para dar entrada a Antony y Garnacho. Con ellos, ganaron amplitud en tres cuartos de cancha. El entrenador neerlandés tiró de intervencionismo, el partido estaba para contraataques y eso hizo el Manchester United, contragolpear y matar al rival. En el primero, Rashford jugó al despiste con la zaga y Fernandes se aprovechó de ello para anotar el 1-1. El segundo fue una transición rápida liderada por el joven Garnacho, el finalizador fue un Marcus Rashford que está en un estado de forma impresionante.
Sin duda, fue una victoria de prestigio para los Red Devils. Ahora están a un punto del otro equipo de Mánchester, algo impensable al inicio de la temporada. Los de Old Trafford siguen creciendo de la mano de Erik ten Hag con un Rashford que va volando y una mejora general muy importante.
