السلام علیکم (as-salaamu 3alaykum? Kaifa hal?) Este es el saludo con el que seguramente te recibirá un musulmán, y literalmente significa: «La paz sea contigo. ¿Cómo está tu salud?». La respuesta más común involucra el género, pero no hay tiempo para ello. Hay otra menos frecuente, pero que resuena igual: الحمد لله (al-Hamdu li-llah) «Alabado sea Alá». Espero que estés muy bien hoy. La vez pasada estuvimos hablando sobre Nizar Trabelsi, un futbolista que se unió a al-Qaeda. Esta fue la entrada para hablar de un tema más general y que involucra a todo el mundo. Llegó el momento de hablar sobre el islam.

Recomendación musical 1

El islam es una religión multiétnica, y mientras estudiosos debaten si la música es permitida dentro de la religión, en los años más recientes ha habido un uso masivo para dar a conocer la fe. El pop islámico comienza a sonar no solamente en países árabes, sino en el mundo occidental. Una personalidad que ha entrado en esta línea es Sami Yusuf (سامی یوسف). Nacido en Londres de padres azeríes exiliados de Irán, usa el folclor de su natal Teherán con elementos sufís y rock. Es el músico musulmán más famoso en el Reino Unido. Esta es una de las canciones donde ha buscado responder a su fe musulmana, You came to me. Con 58 millones de reproducciones, no necesitó de rimbombantes puestas en escena. Solamente usa la caligrafía islámica para alabar a Alá.

Vamos al tema de hoy

Abril: mes ecuménico

Por primera vez en 30 años han coincidido fechas sagradas de varias religiones en un solo mes. Hemos escuchado a cristianos, judíos, budistas, hindúes y de otras religiones que se han reunido para celebrar por todo lo alto. Abril ha hecho oídos sordos a la máxima de Karl Marx: “Die Religion ist das Opium des Volkes” (La religión es el opio del pueblo). Es un mes donde la vibración de buena parte del planeta ha aumentado para ser mejores personas y para anunciar cambios fortuitos en la vida.

¿Cuáles son las festividades religiosas que se celebran en abril de 2022?

Nombre	Religión	Días de abril	Descripción
Pésaj (פסח)	Judaísmo	15-23	Los israelitas acabaron su esclavitud al irse de Egipto
Pascua	Cristianismo	17 (24 para los ortodoxos)	Jesucristo resucitó del reino de los muertos tres días después
Vaisakhi (ਵਿਸਾਖੀ)	Sijs	14	Comienza el año nuevo solar con la cosecha de primavera
Ridván (رضوان)	Baha’i	21-02 de mayo	El profeta Bahá’u’lláh reside en Ridván y proclama su misión como el mensajero de Dios
Mahavir Jayanthi (महावीर जयंती)	Jainismo	14	Nace Mahavir, el vigésimo cuarto y último tirthankara de este ciclo cósmico
Año nuevo	Budismo Theravada	16-18	Comienza el calendario lunar
Reunión de las naciones	Indígenas norteamericanos	28-30	Todas las 565 naciones indígenas se reúnen en Albuquerque, Nuevo México, para celebrar la cultura

Mahavir Jayanthi

Vaisakhti

Pésaj

Pascua

Ahora bien, dejé a propósito una religión fuera, el islam. De hecho, si no fuera por ella, esta coincidencia ecuménica no habría sido posible. Desde el primero de abril hasta el primero de mayo se está celebrando el Ramadán, el mes sagrado para los musulmanes. Precisamente el que se use el calendario lunar ha propiciado esto, ya que cambia cada año.

En Qatar, así como en la mayoría del Mundo Árabe, la religión mayoritaria es el islam. Fortuitamente, en el año mundialista, Ramadán ha caído en abril, coincidiendo con varias celebraciones religiosas. Este es el pretexto perfecto para hablar del islam, así como de historias donde ha tenido que ver el futbol. De antemano ofrezco una disculpa si el texto es incompleto, pues al hablar de una religión corro el riesgo de abordar este tema de manera insuficiente. Esta es la historia.

بسم الله الرحمن الرحيم (Bismillahi Rahmani Rahim | En el nombre de Alá, el compasivo y el misericordioso)

Historia del Islam

El islam es una religión que se basa en el siguiente dogma de fe: لا إله إلا الله محمد رسول الله, (Lā ‘ilāha ‘illā-llāhu Muhammadun rasūlu-llāh). Por ahora, solamente comparto la primera parte de su traducción: لا إله إلا الله, «No hay más Dios que Alá…». Su nombre proviene de la raíz trilítera (س – ل – م) uno de cuyos significados es “sumisión”. De todas las religiones monoteístas, es la que apareció más tarde, en el siglo VII d. C.

Ha llegado el momento de compartir la segunda parte de ese dogma (conocida en árabe como shahada (شهادة)): محمد رسول الله, «… y Mahoma es su profeta». Así es, Mahoma (محمد, Muhammad) es un personaje clave en el establecimiento del islam como religión. Él nació en La Meca (مكة) en el año 570. Era huérfano de una familia importante en esa ciudad, que practicaba una religión politeísta, con deidades menores y mayores, piadosas y malévolas. Más tarde, se casó con la viuda de un rico comerciante, Khadiyah (خديجة).

La vida seguiría su curso normal hasta el año 610. Mahoma era una persona reflexiva y gustaba mucho de orar en una cueva llamada Hira (حراء), actualmente en el Monte Jabal al-Nour (جبل النور). En uno de esos días, se le apareció el ángel Gabriel, quien le dictó algunos versos que aparecerían luego en un libro llamado Corán. Durante tres años de pausa de esas revelaciones, Mahoma se sintió deprimido y se abocó a los rezos diarios. Pasado ese periodo, recibió la orden de empezar a predicar.

No fue sencillo. Primero recibió denuestos y burlas. Había una piedra llamada Kaaba (الكعبة) donde estaban los principales ídolos, y para colmo, la tribu de Mahoma (المدينة), los Quraish (قريش), eran los guardianes. Mahoma no claudicó, y su número de fieles aumentaba día con día. El oprobio se mantendría, pero conforme aumentaba su fuerza, los líderes de esas tribus comenzaron a sentirse amenazados. Si perdían su religión, perderían su fuerza económica.

Intentaron convencerlo de no predicar más ofreciéndole una mejor posición social. Al no aceptar, lo persiguieron. Al descubrir un plan para asesinarlo, Mahoma tuvo que huir a Medina, a 450 kilómetros de distancia. Ese día incierto de junio de 622 se conocería como la Hégira (هجرة). Y es que, en Medina, Mahoma tendría tranquilidad para seguir adelante con la conversión de diversas tribus.

Lo siguiente fue una sucesión de hechos relativamente vertiginosos: la batalla entre La Meca y Medina, el sitio fallido de esta última ciudad, el sitio exitoso de La Meca, la victoria de Mahoma, la primera peregrinación hacia La Meca, la muerte de Mahoma en el año 632, la unión de las diversas tribus que terminarían conquistando toda la Península Arábiga, buena parte del Medio Oriente, Persia, el Norte de África. Ese fue el inicio del islam.

El islam creció en especial cuando los turcos selyúcidas adoptaron el islam, abandonando el paganismo túrquico. Esa dinastía sería la reinante en el Imperio Otomano, que conquistaría Constantinopla en 1492. Esta proeza se llevaría a cabo bajo una madrugada en la que se media luna creciente y todavía se observaba la estrella de Venus. Precisamente los otomanos masificaron aún más la religión, llevándola desde los Balcanes hasta el Subcontinente Indio. Y este imperio masificó la media luna (الهلال, al-hilal) y la estrella como su símbolo, extendiéndolo al islam. Tal es así que en países musulmanes no hay Cruz Roja, sino Media Luna Roja.

Datos del Islam

Actualmente, se estima que hay más de 1.800 millones de musulmanes alrededor del mundo. Es la segunda religión más practicada en el mundo solamente detrás del cristianismo, pero actualmente es la de mayor crecimiento, y se cree que para el siglo XXII el islam terminará rebasándolo. Se localiza sobre todo en Asia y África, pero también está aumentando considerablemente en Europa, Norteamérica y Australia.

Características

El islam se basa en cinco pilares que guían las acciones de los musulmanes:

1. La profesión de fe (shahada, الشهادة). Ya la mencioné párrafos arriba, pero vale la pena mencionarla: No hay más Dios que Alá y Mahoma es su profeta.
2. La oración (salat, صلاة). Cada musulmán debe rezar al menos cinco veces al día en orientación hacia La Meca: al alba (fayr, فجر), al mediodía (zuhr, ظهر), en la tarde (asr, عصر), en el ocaso (maghrib, مغرب) y en la noche (isha, عشاء).
3. La limosna (zakat, زكاة). Dentro de sus posibilidades económicas, el musulmán debe donar el 2,5% de sus ganancias anuales a los pobres. La limosna puede ser en efectivo o en otros pagos, como ganado, mercancías y cereales.
4. El ayuno (sawm, صوم). Durante Ramadán (رمضان), el noveno mes del calendario islámico, el musulmán debe ayunar desde la salida hasta la puesta de sol. El ayuno no solamente es no ingerir ni alimentos ni bebidas, es abstenerse de fumar, ingerir bebidas alcohólicas, sostener relaciones sexuales y de proferir ofensas hacia el prójimo.
5. La peregrinación a La Meca (hajj, حخ). El musulmán debe peregrinar a La Meca siempre y cuando esté apto física y económicamente. 

El libro sagrado de los musulmanes es el Corán (قرآن), basado en especial en las revelaciones que el ángel Gabriel (جبرل) le hizo llegar a Mahoma. Consiste en 114 capítulos (sura, صورة) divididos a su vez en múltiples versículos (o aleyas, آية). Es verdad que hay infinidad de traducciones, pero se prefiere recitar en árabe clásico por ser la palabra directa de Alá. También tienen en gran estima la sunna (سنة), con toda la vida y obra de Mahoma. Ese es el ejemplo que los musulmanes deben seguir. En ellos están los hadices (حديث), o dichos y frases del profeta.

Hablar del islam es también hablar de la sharia (شريعة), traducido del árabe como “camino a seguir”. Aquí es donde se estipulan todas las reglas en la vida del musulmán: los juegos de azar, el alcohol, relaciones extramatrimoniales. También se incluyen las indicaciones para el ayuno, el matrimonio, las donaciones, la herencia y la oración. Esto puede ser adaptable a la vida islámica, pudiendo ser lo más laxo que se pueda, o formar parte de la legislación de un país, como en Arabia Saudita e Irán. Una regla por excelencia es el mandato de observar el viernes como día de guardar (jumu’at, جمعة) y asistir a la prédica en la mezquita. 

Los musulmanes creen en la vida después de la muerte. Creen que habrá un juicio final en el cual en un día solamente conocido por Alá cada hombre será juzgado por sus actos, los cuales vendrán escritos en un libro. Si él o ella lo recibe en la mano derecha, será parte de los piadosos que vayan al Paraíso o Jannah (جنة); pero ¡ay de aquél que lo reciba a la izquierda! Su destinó será el Jahannam (جهنم), o infierno.

Denominaciones del islam

Si bien la umma es la comunidad que alberga a todos los musulmanes, hay diferentes denominaciones que difieren en las interpretaciones de las Sagradas Escrituras:

• Suníes: comprende el 85-90% de todos los musulmanes, creen que Mahoma era un ser perfecto y es el ejemplo a seguir. La sunna y los hadices son mandatorios.
• Chiíes: es el 10-15% de los musulmanes, pero son mayoría en países como Irak, Irán y Líbano. No desobedecen lo que ha dicho Mahoma, pero les dan más peso a las interpretaciones de eruditos. Su principal diferencia es que desconocen a los primeros tres sucesores de Mahoma. Luego veremos esto a detalle.
• Sufíes. Una vertiente de los suníes y chiíes, se enfocan más en ser seres humanos perfectos y su orientación es más bien mística.
• Jariyíes. Creen que el imam, o líder religioso, debe salir de la comunidad. Está más presente en Omán.
• Coranistas: Siguen al pie de la letra las enseñanzas del Corán, y descartan la importancia de la sunna.

 

Estas son las más importantes. Hay otras como los ahmadíes —reformistas—, los alevíes —sincretistas— y los mahdavíes, que veneran a Syed Muhammad Jaunpuri (سید محمد جونپورى), clérigo pakistaní del siglo XV.

Desmintiendo prejuicios sobre el islam

La desinformación ha distorsionado la visión del islam entre los practicantes de diversas religiones. Esto ha dado paso a incomprensión, odio, miedo y persecuciones. Aquí desmentiré algunos de estos prejuicios:

El islam es una religión árabe

Si bien es una religión surgida en la Península Arábiga, la sucesiva expansión le ha quitado esta etiqueta. Primero que nada, no todos los árabes son musulmanes; hay cristianos, drusos, judíos, coptos, seguidores de religiones autóctonas e incluso ateos. Actualmente, apenas el 25% de los musulmanes son árabes. La mayoría se localiza en zonas con mucho crecimiento demográfico, como el subcontinente indio, el sureste de Asia y África occidental y central. Indonesia es el país con más musulmanes (231 millones). Cabe destacar que en China apenas el 3% de su población sigue esta religión, pero este número (50 millones de acuerdo con cálculos más optimistas) sobrepasa a países tradicionalmente mayoritarios, como Argelia, Irak, Marruecos o Afganistán.

El islam es una religión diferente del cristianismo o el judaísmo

Esta religión tiene muchos puntos en común con ambas y sigue la tradición abrahámica. Dentro de los libros considerados sagrados por los musulmanes está la Torá y la Biblia. Jesús es el penúltimo profeta antes de la llegada de Mahoma y en el día de la resurrección llegará a legislar con base en el Corán. Por último, Jerusalén es la tercera ciudad sagrada para los musulmanes (llamada al-Quds, القـدس), junto con La Meca y Medina. La mezquita al-Aqsa (مسجد الأقصى, Masyid al-Aqsa) señala el lugar donde Abraham estuvo a punto de sacrificar a su hijo Ismael (Isaac de acuerdo con la concepción judeocristiana).

El islam es una religión violenta

Esta concepción ha quedado desmentida desde el texto pasado. Hay vertientes del islam que hablan de la yihad o guerra santa. Algunas interpretaciones hablan de convertir a infieles de manera invasiva, pero esto es apenas la corriente wahabista del salafismo. Esta belicosidad está presente en todas las religiones, como la expulsión de los musulmanes por parte de los Reyes Católicos, la Inquisición española y catalana, el gobierno budista de Myanmar y su persecución a la etnia rohingya (más información acá), la orientación de Narendra Modi (नरेन्द्र मोदी) que beneficia a los hindúes en detrimiento de los musulmanes, o los mismos extremistas judíos que se han lanzado al ataque en Israel también contra musulmanes. Por si no ha quedado claro, Mahoma decía que matar a un hombre equivalía a matar a toda la humanidad.

El islam es una religión que fomenta la ignorancia

Durante la Edad Media los principales adelantos tecnológicos, científicos y filosóficos fueron hechos por científicos, pensadores y sabios del islam. Aristóteles, Platón, Plotino y Euclides regresaron a Occidente mediante traducciones del árabe. Omar Khayam (عمر خیّام) fue un polímata que trabajó con la poesía y la astronomía, al-Juarismi nos aportó el álgebra, Avicena (ابن سینا, Ibn Sina) fue el mejor médico durante su tiempo, al-Maqdisi (المقدسي) realizó los primeros mapas a color. Finalmente, Ptolomeo, nacido en Alejandría, fue la principal inspiración de Copérnico para su teoría heliocéntrica.

 

El islam discrimina a las mujeres

Quizá no hay mayor concepción más perniciosa que ésta. Es cierto que las mujeres tienen diferentes derechos que los hombres. En realidad, el hadiz 25 dice que todos los hombres son iguales en esencia. Ya en Oriente se hablaba de una posición igualitaria de la mujer. Un ejemplo es el papel de Sherezada (شهرزاد) en Las mil y una noches (ألف ليلة وليلة, Alf Layla wa Layla), que con su ingenio logró dilatar la ejecución de su esposo el sultán. Una de las esposas de Mahoma, Salma (سلمة), participó en iniciativas de su comunidad. El principal estratega de las Cruzadas, Saladino (صلاح الدين), debe su enseñanza a haber vivido en harenes. Pakistán tomó pasos hacia la modernidad con la llegada de la presidenta Benazir Bhutto (بينظير ڀٽو). La discriminación se basa en interpretaciones perversas del Corán o la Sunna.

Con un panorama general del islam, ya podemos adentrarnos en cómo se ha incorporado al mundo del futbol.

¿Ver futbol es haram o halal?

Como te mencioné anteriormente, la sharia es un código de conducta de musulmanes con base en las interpretaciones de diversos eruditos sobre los libros sagrados, en especial el Corán y la Sunna. Esto quiere decir que algunas veces estas opiniones pueden contradecirse. Este es el caso del futbol, que puede ser o algo benéfico o algo dañino para la fe musulmana.

En realidad, practicar el futbol está permitido, ya que cumple con las cuatro condiciones: involucra movimientos físicos, puede formar parte de entrenamiento militar, fortalece el cuerpo y desarrolla diversas destrezas.

El debate se intensifica con respecto a ver el futbol. Algunos estudiosos del islam creen que esto es haram (حرام), que es la palabra árabe para designar el pecado. Las razones son:

• Los futbolistas no se cubren las partes íntimas, lo que puede atraer la atención de las mujeres.
• Retrasa o impide que los futbolistas puedan rezar a sus horas.
• Puede romper a la comunidad en varios grupos, los cuales se pueden enemistar entre sí.
• Vuelve más propensos a los futbolistas al daño a través de lesiones.
• Distrae a la comunidad.
• Incita a amar e idolatrar a gente desobediente e infiel, y de colgar imágenes de estos cracks en la pared.

Un ejemplo de hasta dónde puede llegar esta prohibición es en Somalia con grupos como al-Shabaab (الشباب) y Hizbul Islam (حزب الإسلام). Algunas personas que estaban viendo la Copa del Mundo de Sudáfrica fueron apresadas por estos grupos al considerar que era una pérdida de tiempo y distraía del verdadero islam. Irónico que esto haya sucedido en un país en África para ver el primer mundial en suelo africano. (Para más información del futbol en Somalia, haz clic acá). O también la misma práctica ha sido prohibida, como pasó cuando un equipo de pastunes de Pakistán osó jugar en Afganistán; los talibanes interrumpieron un partido deteniendo a los forasteros y soltándolos al día siguiente, no sin antes raparlos como castigo (más información aquí)

 

Sin embargo, hay más voces que en realidad dicen que ver futbol es halal (حلال), o palabra árabe que indica las cosas que están permitidas. Estas son las razones:

• No hay evidencia concreta o auténtica en el Corán o en la Sunna
• Es un juego que en realidad salvaguarda a la comunidad.
• Muchos eruditos que dicen que es haram en realidad no se refieren al futbol per se, sino a otros factores intrínsecos o extrínsecos.
• Son más los beneficios del futbol que los riesgos
• Ver el futbol no necesariamente previene los rezos ni expone las partes íntimas.
• No causa difamación o insultos entre aficionados
• No causa que la sharia sea ignorada.
• Ver el futbol en realidad permite que alguien se apegue a cuestiones éticas que premia el islam

Negarse a patear un balón e incluir la bandera

Durante el mundial de Corea-Japón 2002, la FIFA tuvo la maravillosa idea de incluir balones donde las banderas de todos los países participantes fueran gajos. Todos aceptaron, excepto Arabia Saudita. Sucede que esta bandera verde incluye la espada de la victoria de Ibn Saud que subraya la shahada en blanco. Patear constantemente esa inscripción sagrada sería un pecado que no estaban dispuestos a cometer.

Cuatro años después, en Alemania, un club de striptease en Colonia también tuvo la idea de incluir las banderas de las 32 selecciones en su decoración. De inmediato Arabia Saudita e Irán protestaron. En el caso de Irán, esta república islámica incluye en su bandera 22 veces la takbir “Allahu akbar” (الله أكبر) y lo que está escrito en rojo es la palabra Alá (الله). Escrituras así no debían contaminarse con la pecaminosidad de un lugar dedicado al placer carnal, así que no hubo más remedio que quitarlas.

Ramadán, ¿razón para el bajo rendimiento de los futbolistas?

El debut de Mourinho en el Inter de Milán fue en la temporada 2009-10. Su primer partido fue ante Bari, el cual terminó en empate a un gol, y tras ello fue criticado a lo largo de todo el mundo musulmán. El pecado fue sustituir al ghanés Sulley Muntari al minuto ‘30 y excusarse en la declaración post partido con que tal vez le había faltado energía debido a que estaba ayunando por el Ramadán.

Esto fue la primera declaración seria donde el ayuno durante el Ramadán podía afectar al rendimiento de un futbolista de élite. Como te dije anteriormente, el ayuno se da desde el alba hasta el ocaso y durante ese periodo no se puede ingerir ningún alimento ni bebida, ni siquiera agua para hidratarse o refrescarse. Esto puede causar cambios de humor, estreñimiento, afectaciones en el sistema inmunológico, alteraciones en el nivel de juego e incluso la deshidratación.

Hay quien cree que el futbolista musulmán de élite baja su nivel de juego durante el Ramadán y vuelve tan pronto acaba. El pretexto fue ver a Demba Ba, senegalés que militaba en el Newcastle United. Tan pronto acabó el mes sagrado, al siguiente partido se despachó con tres goles. También se le atribuye al Ramadán la lesión que privó a Mohamed Salah la lesión que sufrió en la final de la Champions League 2018-19 contra el Real Madrid, y por la que eventualmente no hubo podido comandar a la selección egipcia durante el mundial de Rusia.

Con el número creciente de futbolistas musulmanes en las principales ligas de futbol, esta preocupación del ayuno masivo ha crecido de manera considerable. Los equipos con frecuencia tienen en su plantilla a nutriólogos, que diseñan dietas especiales para los musulmanes que cumplen con las obligaciones del Ramadán. Por ejemplo, el desayuno tiene alimentos ricos en fibra, fruta y muchísima agua, mientras que por la noche se consumen alimentos ricos en carbohidratos, proteínas y bebidas llenas de minerales. Claro, hay que beber poco a poco y comer con moderación para evitar el empacho. Y hay mucha vigilancia en los clubes, ya que con frecuencia los jugadores comen fuera de la ciudad deportiva, y eso debe estar limitado para continuar con el peso ideal.

Ahora bien, en ligas como la Bundesliga y la Premier League los árbitros ya están deteniendo el juego para que los jugadores musulmanes puedan romper el ayuno en la hora indicada, más cuando los partidos son por la tarde-noche.

En ocasiones, los equipos reciben el salvoconducto para romper el ayuno a diversas horas, como ocurrió con la selección de Arabia Saudita en el mundial de Rusia. Sucedía que, por la latitud, este país tiene días muy largos durante el verano, experimentando las llamadas noches blancas, donde el sol apenas se oculta cuatro horas. Como esto podría comprometer las aspiraciones saudiárabes, se entendía por qué pedían una exención. Es más, esta es una de las pocas situaciones donde los musulmanes no siguen al pie de la letra estas indicaciones.

Crecimiento de la participación de musulmanas en el futbol

Un tema tabú dentro del islam es la participación de mujeres en el futbol. No es una contradicción con lo que te mencioné en la aclaración de prejuicios sobre el islam, sino que es una mera interpretación de los textos sagrados. Para estos eruditos, los hombres no pueden ver las partes corporales de mujeres, limitando la práctica de estos deportes a estadios a los cuales se prohíbe la entrada de hombres.

Esto ha causado que el futbol femenil haya quedado rezagado en los países musulmanes con una legislación basada en la sharia. En estos casos, la vestimenta de futbol ordena que el pelo, las piernas y los brazos estén cubiertos. Cuando el país es más bien laico, como el caso de Turquía, las jugadoras visten con las camisetas y shorts como los conocemos, y el pelo está descubierto. La FIFA estuvo mucho tiempo renuente a modificar las reglas para este caso, afectando a la selección de Irán en 2011. Al año siguiente tuvo que realizar cambios al reglamento, apreciados por ejemplo en el uniforme de Afganistán fabricado por la marca Hummel, el cual incluía hijab, o velo (más información aquí).

Las mujeres musulmanas han dado pasos lentos, pero seguros, y la FIFA las ha apoyado para que se integren al planeta futbol. Gracias a la intercesión de la reina Rania, Jordania organizó el primer torneo femenil de futbol, el mundial sub-17 de 2016 (aquí hablo de eso). También le ha dado difusión a historias de superación, como a la afgana Khalida Popal (خالده پوپل), que se negó a dejar jugar futbol por mandato del régimen talibán, y se refugió en Dinamarca. Gracias a ella se supo de un caso de abuso sexual que terminó condenando al presidente de su federación (más información, acá).

También las mujeres comienzan a ganar espacios. La FIFA le ha impuesto un ultimátum a Irán para que permita la asistencia de mujeres a los estadios. Ha comenzado durante el mundial de Rusia y ha sido una realidad en las eliminatorias a Qatar 2022. Aún falta mucho trecho, pero es una gran iniciativa (más información, aquí).

Ha sido cuestión de tiempo para que las musulmanas se aparezcan en el concierto del futbol de élite, como la presencia de jugadoras cracks como, la alemana-kosovar Fatmire Alushi, las francesas Kheïra Hamraoui y Jessica Haouara-d’Hommeaux o la nigeriana Asisat Oshoala.

Futbolistas musulmanes famosos 

Los futbolistas musulmanes han sido los profetas modernos del islam. Que esto no se malinterprete como un sacrilegio del Corán. Lo que quiero decir es que todos ellos han contribuido a dar el mensaje de lo que verdaderamente es el islam: una religión de personas abiertas, acogedoras, amables, humildes, desinteresadas, sinceras, audaces, esforzadas y caritativas.

 

El futbolista musulmán más famoso del mundo es el egipcio Mohamed Salah (محمد صلاح), que ha ganado dos veces el Botín de Oro de la Premier League (2017-18 y 2019-20). Su historia de sacrificio y éxitos le han valido ser una materia de educación básica en su país natal. En el Liverpool ha hecho una sensacional mancuerna con Sadio Mané, un senegalés que jamás se olvida de su pueblo Bambali. Él mismo ha financiado la construcción de hospitales en Senegal. Él también ganó un Botín de Oro, pero en 2018-19.

Sin embargo, el atleta musulmán mejor pagado es el francés Paul Pogba del Manchester United. De acuerdo con cifras oficiales, recibe una paga anual de 19,15 millones de libras esterlinas. Por más que ha buscado la discreción, con frecuencia cumple la zakat donando a iniciativas como Save the Children, y pagando el salario de un año como mascota del joven Sam, con parálisis cerebral. En segundo lugar se coloca Ousmane Dembélé, del Barcelona, con 14,62 millones de libras esterlinas por año. Y un jugador que se ha robado los corazones de todo el mundo por su sencillez y su dedicación es N’Golo Kanté, del Chelsea. Ha vivido siempre bajo los preceptos del islam y le dio la vuelta al mundo una fotografía suya haciendo el hajj en La Meca y Medina. 

Otro futbolista musulmán que ha aprovechado su estatus mediático para cambiar el mundo a través de sus principios es el turco-alemán Mesut Özil, sobre todo en su estancia en el Arsenal. Cuando se viralizaron las condiciones indignantes a las cuales China sometía a los uigures en campos de concentración, nadie se atrevía a protestar para no comprometer los jugosos contratos con los medios chinos, hasta que Özil fue el único que alzó la voz. Los turcos están emparentados con los uigures y él no podía permanecer indiferente. Otra buena obra fue interceder para que la mascota del Arsenal no perdiera su empleo por la pandemia, pagando su salario de su bolsillo. Claro que esto fue motivo para que lo cepillaran de su club (más información aquí).

¿Qué otros jugadores musulmanes hay actualmente? El marroquí Hakim Ziyech (حكيم زياش, Chelsea), el argelino Riyad Mahrez (رياض محرز, Manchester City), el marroquí Achraf Hakimi (أشرف حكيمي, PSG), el turcoalemán Emre Can (Borussia Dortmund), el francés N’Golo Kanté (Chelsea), el belga Marouane Fellaïni (مروان فيلايني, Shandong Luneng), el francés Karim Benzema (كريم بنزيما, Real Madrid), los marroquíes Bono (بونو) y Youssef En-Nesyri (يوسف النصيري, Sevilla), el iraní Sardar Azmoun (سردار آزمون, Bayer Leverkusen) y el argelino Rachid Ghezzal (رشيد غزال, Beşiktas). La lista es sorprendentemente larga.

Esta religión también ha invitado a futbolistas que no nacieron musulmanes, pero que se convirtieron por amor, al tener una cónyuge que sí era musulmana. En el islam está prohibido que un infiel contraiga nupcias con una mujer que siga el islam, y deben convertirse. Es el caso de jugadores como los franceses Franck Ribéry, Thierry Henry, Éric Abidal y Nicolas Anelka; el togolés Emmanuel Adebayor, el nigeriano Eneka Ezeumo y los neerlandeses Robin van Persie y Clarence Seedorf.

Vivencia personal: cuando recibí la caridad de los musulmanes

Cuando cursaba sexto año de primaria estudié en una escuela del sistema Montessori llamado Cintli. Claro, no estuve exento del bullying y hubo un chico de cuarto año que era muy respondón. Una vez en el baño me encaró y me arrojó una botella de agua. Eso fue en 2001. Seis años después, en la preparatoria, me tocó sufrir el acoso que más me marcó por parte de una persona. Era el final de curso y fui al baño. El verdugo en ese momento aprovechó para intimidarme y que él pasara primero a hacer sus necesidades.

Adelantemos un poco el tiempo. En 2013 recibí la oportunidad de representar a México en una competencia del idioma chino llamado Puente Chino (汉语桥比赛). Competí contra 126 estudiantes de 80 países. Aunque nos separaban por continentes, pude separar esas barreras y di mi amistad a todo el mundo. Sí, mexicano finalmente. Claramente había un contingente musulmán. Logré una gran amistad precisamente con los representantes de Turquía y el subcontinente indio (India, Pakistán y Bangladesh). Curiosamente, uno de los turcos hablaba muy bien español y me dijo que conocía el futbol mexicano, mencionando como primer equipo a mi Toluca. ¡No lo podía creer! El pakistaní solamente hablaba inglés, urdu y chino, pero cada que me veía gritaba con vehemencia: «¡MI AMIGO!».

 

Una de las etapas en este concurso era decir un discurso en chino de 90 segundos donde hubiera loores y elogios hacia la cultura china. La eliminatoria del continente americano era el primer día y al final; es decir, todo mundo nos vería. Antes de pasar, estaba frustrándome porque no lograba decir mis líneas con los tonos correctos. Me estaba poniendo nervioso. Lo que quería era dejar el nombre de México en alto. Para calmarme, fui al baño.

Apenas treinta segundos después de haber entrado, todos mis cinco amigos musulmanes también entraron. No fue para intimidarme, ni mucho menos para lanzarme agua. Me desearon mucha suerte y me dieron un abrazo grupal. Sentir ese apoyo me nutrió el alma, me calmó y me motivó a dar lo mejor. Así también logré exorcizar un recuerdo traumático.

Estos eran los representantes de Bangladesh, India y Pakistán

Quedé dentro de los últimos, pero tras bambalinas logré hacerme amigo de todos por las actitudes que mostré y por usar todos mis idiomas para romper esas separaciones. De todas maneras, ese abrazo grupal de musulmanes es algo que hasta la fecha atesoro y nunca olvidaré. Estos musulmanes me aceptaron a mí, un católico. Ellos, asiáticos, me aceptaron a mí, ciudadano de un país separado por miles de millas náuticas.

La mesa de todos los musulmanes

Este es apenas un pequeño panorama sobre cómo el islam ha permeado en la práctica del futbol. Ya sea por medio de las estrellas rutilantes, la situación del ayuno en el mes del Ramadán o la prohibición del deporte sujeta a dudosas interpretaciones, esta religión sigue siendo vista con suspicacia e inquietud. La demografía cambiante en países europeos causa que cada vez haya un mayor interés y el futbol es una manera brillante de cambiar esas percepciones. Espero que este texto sea considerado como un esfuerzo para tender puentes hacia esta fe, recordando que lo que nos une es creer en una fuerza superior. Que este mes ecuménico sea la excusa perfecta para ver lo que nos une, no lo que nos separa. Ya lo dijo el Profeta Mahoma (La Paz Sea con Él):

وَتَعاوَنوا عَلَى البِرِّ وَالتَّقوىٰ ۖ وَلا تَعاوَنوا عَلَى الإِثمِ وَالعُدوانِ

Ayudaos unos y otros a practicar la bondad y la piedad, no el pecado y la violación de la ley. (Sura al-Maida (5:2), Corán)

Quiero agradecer de todo corazón la ayuda que me proporcionó el Centro Educativo de la Comunidad Musulmana. Amablemente me explicaron todo sobre el islam, respondieron mis preguntas, incluso me dejaron sentar a su lado para romper el ayuno a pesar de no ser musulmán. Para saber más al respecto de esta religión, puedes contactarlos a ellos por Facebook.

Fuentes

Council of Bishops. Interfaith Greetings this Holy Week. The United Methodist Church.
La Vanguardia. ¿Qué es el islam? 5 de mayo de 2006
Fernández Arribas, Jorge. Grandes futbolistas musulmanes. Atalayar. 23 de diciembre de 2020
Cunningham, Sam. Islam in Football: The profound effect the religion has had on the Premier League. iNews. 23 de marzo de 2018
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Después de hablar del islam, ha llegado el momento de seguir nuestro camino a lo largo del mundo árabe. Nos habíamos quedado en Túnez y ahora es momento de ir hacia el este, a Libia. Durante mucho tiempo tuvo como líder al irreverente Muammar Gaddafi. En ese momento Libia era una potencia que casi logró clasificar a un mundial. No fue el único episodio en el cual afectó al futbol. Su hijo al-Saadi jugó unos partidos de la Serie A. Esa historia la veremos en nuestra siguiente parada.

Recomendación musical 2

Otra versión de la música islámica es el qawwali (قوّالی). Surgida en la India islámica, es un canto de devoción con repeticiones de poesía sufí. Es un grupo de ocho o nueve músicos, con dos armonios, una tabla y una voz principal que dicta cómo va el canto. El islam no se habría extendido tanto por India y Pakistán si no fuera por esta música. Tuvo su auge en los años 70 con la labor del Ustad Nusrat Fateh Ali Khan (نصرت فتح علی خان) y los hermanos Sabri (صابری برادران). En 2015, la octava temporada de Coke Studio Pakistan invitó a Atif Aslam (عاطف اسلم) a cantar Tajdar-e Haram (تاجدارِ حرم, Rey de la Kaaba), un qawwali de los hermanos Sabri. Es el primer video de Pakistán en cruzar la barrera de las 100 millones de vistas, y ahora tiene hasta la fecha 342 millones, desperdigados por 186 países. Con esta rendición moderna despedimos el texto.

Recapitulemos

Por primera vez en 30 años, ocho religiones tienen festividades sagradas en un mismo mes. En el caso del islam, está el Ramadán, el mes sagrado del calendario lunar. Es una religión monoteísta surgida en el siglo VII d.C. en Arabia Saudita. Proclama la creencia en un solo Dios y la veneración del profeta Mahoma. Se basa en el cumplimiento de cinco pilares: profesión de fe, la oración, la limosna, el ayuno y la peregrinación a La Meca. Actualmente cuenta con 1.800 millones de fieles, siendo así la segunda religión en número. Su texto es el Corán, su ética es la sharia y creen también en la vida después de la muerte. Tienen varias denominaciones, siendo las principales los suníes, los chiíes, los sufíes y los jariyíes. Los principales prejuicios son: es una religión árabe, propicia la violencia, difiere del cristianismo y el judaísmo, fomenta la violencia y discrimina a las mujeres.

En el futbol el islam está presente. Es más considerado halal que haram. Las selecciones de Irán y Arabia Saudita se han negado a profanar la religión al colocar sus banderas en balones o en centros de entretenimiento sexual. Hay una preocupación creciente por el ayuno en el futbol de alto rendimiento. Las musulmanas comienzan a involucrarse en el deporte. Los futbolistas más famosos son Mohamed Salah, Sadio Mané, Paul Pogba, Ousmane Dembelé, N’Golo Kanté, Mesut Özil y Riyad Mahrez, entre otros.

Para despedir este texto, quiero desear un feliz Ramadán a todos los musulmanes que lean este texto, que sea un momento de reflexión y mejora personal. Para desear un Feliz Ramadán hay que decir: