HISTORIAL:
¿CÓMO CLASIFICÓ?
ANÁLISIS:
La generación dorada de Bélgica acabó muy mal. No fue un ciclo que fracasase, un término fatal entendido en esto del deporte, que estuvo a dos partidos de ser campeona del mundo, pero sí se hizo visible, en su tramo final, un evidente desgaste. Qatar fue la culminación de una era, una buena etapa que se quedó sin aquello que te legitima en la historia, el triunfo final, pero que compitió hasta el final en varios torneos.
Ahora ya no está Eden Hazard, tampoco Courtois -por un motivo diferente-, ni Alderweireld, Vertonghen es mayor y los mejores días de Romelu Lukaku parecen ser cosa del pasado. Incluso Roberto Martínez abandonó el barco. Pero se mantiene Kevin de Bruyne, y eso es sinónimo de competir.
Buscando evolucionar y no quedarse anclados en el pasado, la federación belga apostó por Domenico Tedesco y el italo-germano ha traído savia nueva y un estilo novedoso al equipo, por lo que se presentan en Alemania con una consideración menor que en los torneos más recientes, pero con la expectativa por hacer algo importante. Con esta generación de oro muchas veces dio la sensación de que, sabían sus oportunidades tan limitadas, que el miedo a perder les paralizaba en las grandes ocasiones. Ahora hay poco que perder, nadie les espera, y eso podría incrementar el deseo de ganar.
Es esta Bélgica un equipo muy vertical, lo normal si tienes en tus filas a un fantástico jugador para escapar de presiones, Youri Tielemans, un dinamitador a campo abierto, De Bruyne, y flechas arriba como Lukaku, Doku y Trossard. Buscan salir jugando desde atrás, normalmente con una estructura 2+3 con laterales bajos y Onana en la base junto a un interior que desciende para apoyar y ayudar a dar salida. Las intenciones son, tras atraer en primeros pases, ser muy verticales buscando el juego de espaldas de Lukaku (importante la conexión directa que tiene Casteels con él, saltándose alturas intermedias) o los desmarques de Doku y Trossard, que se intercambian las bandas constantemente, a la espalda de la defensa rival.
Cabe incidir en lo bien que saben salir de situaciones de presión, jugando muy bien con las atracciones y sujeciones arriba, logrando atacar última línea de cara. Es posible que Tedesco se decante en algunos partidos por Orel Mangala como interior, un jugador de mucha más presencia física y sin balón, pero con Tielemans tiene a uno de los mejores jugadores del mundo para girar presiones y encontrar compañeros. Ahí, si De Bruyne recibe a campo abierto para lanzar al tridente, el rival solo puede rezar.
Ya instalados en campo rival, le gusta a Tedesco construir con tres jugadores en primera línea, con uno de los laterales cerrándose como un tercer central. Lo lógico sería que ese rol le cayese a Arthur Theate en la izquierda, con Castagne y Doku dando la amplitud por fuera. Buscan mucha recepción exterior, especialmente buscando al eléctrico extremo del Manchester City, y luego rupturas en intervalo central-lateral, siendo un equipo que ataca bien la profundidad y conquista la línea de fondo. Concentran por momentos el juego en un sector, con los dos interiores en pocos metros, para luego encontrar las ventajas en el lado débil.
En transición son muy peligrosos, con la amenaza al espacio descrita con anterioridad, y manejan diversas alternativas. Pueden juntar a dos delanteros, seguramente dando entrada a Loïs Openda, en un 4-4-2, o pueden formar directamente con una línea de tres centrales, tan característica del ciclo de Martínez.
Sin balón, pese a que en algunos momentos optan por presiones altas, buscando robar arriba, lo normal es que esperen en un bloque medio, en 4-3-3 o 4-4-2 dependiendo de la altura de De Bruyne, que incita al rival a meter gente por delante de balón para luego castigarles atacando en transición. Tienen un auténtico pulpo en carril central, Amadou Onana, que tapa bien las recepciones, se impone en los duelos y llega a las coberturas. Si el del Everton recupera y cualquiera de los interiores está cerca para recoger el balón, montan la transición en un segundo.
Si deciden presionar arriba poseen dos estructuras dependiendo de cómo forme el rival. Si enfrentan una línea de 4, lo normal es ver a De Bruyne subir junto a Lukaku para emparejar frente a centrales; si, en cambio, el rival usa tres centrales, son los extremos, junto al delantero, quienes emparejan ante ellos. Más allá de estructuras, también cabe detenerse en el fantástico trabajo y coordinación de su última línea, tirando muy bien el fuera de juego, compenetrándose a la perfección y siendo capaces de defender lejos de su portería.
Les puede faltar calidad en ambas áreas para resolver partidos en las instancias más altas de la competición, pero son un equipo bien entrenado que se quiere desquitar del varapalo en el pasado Mundial. Después de haber perdido tanto, quizás ya no le temen a ganar.
XI TIPO:
FIGURA: KEVIN DE BRUYNE
Una dura lesión le ha apartado de media temporada y, al volver, se ha notado que ha perdido una pizca de su característica explosividad, pero sigue siendo uno de los mejores jugadores del mundo, uno que modifica dinámicas a favor y condiciona planteamientos rivales. Debido a esas complicaciones físicas, no tiene demasiado rodaje bajo las ideas de Tedesco, pero entrenador y estrella están condenandos a entenderse.
Un golpeo sensacional, creatividad para descender a la base y ayudar a progresar, capacidad para llegar arriba y poner envíos peligrosos en el área… nadie va a descubrir ahora a Kevin, pero sí se pondrá a prueba aquello donde muchos han encontrado uno de los pocos lunares de su carrera, que es la capacidad de liderazgo.
PROMESA: ZENO DEBAST
Tras Kompany, Alderweireld y Vertonghen, Bélgica está sufriendo una crisis de talento defensivo que les deja a la zaga respecto a las grandes favoritas, pero Zeno Debast en el indicado para recoger el testigo y liderar a esta nueva selección. Apenas 20 años, pero ya son dos temporadas a un nivel fantástico en el Anderlecht y reclamando su llegada a un club superior.
Central o lateral derecho, pero siempre quedándose atrás en construcción, aprovechando su visión para conectar en largo y romper sistemas rivales, otorgando mucha calma y tranquilidad en momentos de presión. Sin balón tiene inteligencia para tirar la línea y buscar anticipar, pero puede sufrir más ante delanteros físicos que buscan mucho el choque.
ENTRENADOR: DOMENICO TEDESCO
Entrenador de corta pero exitosa carrera, siendo uno de los pioneros en Europa, con su RB Leipzig, de la corriente actual de sobrecargar todo el juego en un sector, algo de lo que se ven trazos en la selección belga. Uno de esos entrenadores alemanes de corta edad (apenas 38 años), con métodos revolucionarios que ponen en jaque este juego.
Cómo no, salió de las categorías inferiores del Stuttgart y el Hoffenheim, bajo el paraguas de Rangnick y Nagelsmann. Empezó su carrera en el fútbol profesional dirigiendo al Erzgebirge Aue, antes de ir al Schalke y hacerle subcampeón de Alemania. De allí emigró a Rusia, al Spartak Moscú, antes de volver a Alemania para dirigir al citado RB Leipzig. Agarró las riendas de la selección en febrero de 2023.
LISTA DE CONVOCADOS:
