Trigésima tercera jornada. El duelo que todo seguidor de la mejor liga del mundo estaba esperando, en el Etihad se enfrentaban Manchester City y Arsenal en un duelo no definitorio, pero sí trascendental en la lucha por el título liguero. El destacado es el entrenador vencedor: Pep Guardiola.
El partido, desde el inicio, fue sky blue. Y lo ganó el Manchester City a través de la pizarra de Pep. El técnico de Sampedor cambió la estructura que viene usando (3-2-2-3) para utilizar un 4-4-2 con un Kevin de Bruyne más adelantado de lo habitual para sacar ventajas.
Guardiola juntó a Gündoğan, De Bruyne y Bernardo Silva para agilizar la circulación, generar superioridad y apoyos constantes a Rodri. Rotando entre ellos constantemente, superaron al centro del campo rival.
El Manchester City contrarrestó la presión del Arsenal con balones largos, donde Stones iniciaba buscando a los dos de arriba; De Bruyne esperaba detrás de Partey y Xhaka cuando éstos presionaban, y mientras Holding saltaba en la presión, Kevin junto a Erling castigaban al rival al espacio. La nueva posición de Kevin de Bruyne causó el caos en la zaga gunner.
En tarea defensiva, con la baja por lesión de Nathan Aké, el que cerró por izquierda fue Akanji, con Kyle Walker en posición natural volviendo al once. Y lo cierto es que tanto ellos como Días y Stones, secaron al ataque gunner; ni rastro de Martinelli, Gabriel Jesús, Saka y Ødegaard. Todo gracias al trabajo de los zagueros más el enorme laburo de Grealish ayudando a Akanji.
La presión la lideraban Haaland y De Bruyne. Mientras, Bernardo se sumaba al medio para formar la «caja» y provocar al arrastre de Zinchenko. La posición de Jack Grealish hizo que se produjera mayor espacio entre centrales (Holding y Magalhães). Días perseguía a Ødegaard para cortocircuitar la creatividad del cuadro londinense.
Guardiola planteó un escenario diferente al del partido de ida, con mayor control, matando al espacio y una presión ordenada con el trabajo de todos. El español ganó la partida de ajedrez gracias a lo que mejor le define: su adaptabilidad ante cualquier situación. Siempre es capaz de contrarrestar al rival y reinventarse cada temporada, el Manchester City de Pep muta constantemente. Una pizarra de élite para un escuadrón de élite.